CABA
Boleta Única de Papel: Intendentes del peronismo bonaerense recuperan el poder territorial en 2025
La implementación de la Boleta Única de Papel (BUP) en las elecciones de 2025 reconfigura las relaciones de poder dentro del peronismo bonaerense. Los intendentes ven en este cambio una oportunidad para recuperar el control en sus distritos, liberándose de las imposiciones de Cristina Kirchner y La Cámpora, y devolviendo protagonismo a las secciones electorales, tal como sucedía en la época de Duhalde.
La introducción de la Boleta Única de Papel en las elecciones nacionales supone un quiebre con las tradicionales boletas sábana, en las que las candidaturas nacionales se vinculaban estrechamente con las municipales y provinciales. A partir de este cambio, las candidaturas nacionales, como la eventual postulación de Cristina Kirchner a diputada nacional, estarán separadas de las boletas locales, donde todavía se utilizarán las boletas partidarias clásicas.
Este cambio genera una mayor autonomía para los intendentes, quienes ya no dependerán de las listas armadas por la cúpula del peronismo. "Nos libera de Cristina y La Cámpora, el poder vuelve a las secciones electorales como en la época de Duhalde", explicó un intendente del interior de la provincia en diálogo con La Política Online (LPO).
La Boleta Única de Papel plantea un doble efecto. Por un lado, a nivel municipal, en la elección de intendentes y concejales, y por otro, en el armado de listas para diputados y senadores provinciales, que son elegidos en las ocho secciones electorales de la provincia. Los intendentes creen que ahora tienen la oportunidad de unirse y armar sus propias listas de legisladores, aumentando su poder en la política provincial.
"Con la boleta sábana casi no logramos meter candidatos a diputados y senadores provinciales. Ahora, con la BUP separada del resto, recuperamos la lapicera", afirmó otro intendente a LPO.
Con la Boleta Única de Papel, los candidatos locales ya no dependerán del "arrastre" de figuras nacionales para ganar posiciones en sus distritos. Este cambio permite que los intendentes puedan armar sus propias listas sin la amenaza de no recibir la boleta nacional. "Ya nadie va a poder venir con la amenaza de no darnos la boleta, y al que no le gusten nuestros candidatos, que nos arme una PASO", desafió un jefe comunal.
Además, se espera que este nuevo sistema termine con la imposición de candidatos "forasteros" en las listas seccionales, un reclamo histórico de los intendentes del interior que debían ceder posiciones ante acuerdos nacionales. Ahora, los dirigentes del Conurbano que no logran puestos expectantes en sus distritos no podrán ocupar lugares en secciones donde no son conocidos ni tienen base política.
Cristina Kirchner parece haber comprendido la profundidad del cambio y realizó una visita a La Matanza, uno de los bastiones del peronismo, en un intento de marcar territorio frente al nuevo escenario que se avecina. Los intendentes creen que, al recuperar peso en sus distritos, podrán tener mayor control sobre las candidaturas a nivel provincial y local.
El líder de La Libertad Avanza, Javier Milei, fue advertido sobre cómo la Boleta Única desenganchaba el arrastre de las candidaturas nacionales de las municipales y seccionales, pero decidió seguir adelante con su discurso contra la "casta", a pesar de que esto podría debilitar su armado territorial. "Se regaló porque no entiende mucho de política", comentó un dirigente libertario a LPO.