La fractura del kirchnerismo: Kicillof desafía a Cristina en busca de liderazgo propio

La división dentro del kirchnerismo se profundiza día a día, con diferencias que se hacen más explícitas. Mientras Cristina Kirchner intenta consolidarse como la líder del peronismo, Axel Kicillof envía señales de independencia para limitar su influencia. Curiosamente, lo hace sin palabras, usando el silencio como herramienta política.

En este contexto, el gobernador bonaerense ha dado pasos claros para construir su liderazgo y marcar un límite a las presiones de La Cámpora, que cuenta con el apoyo de la ex presidenta. Entre las señales de diferenciación se destacan cuatro: su resistencia a postularse como candidato presidencial pese a la presión de Máximo Kirchner, la defensa de Verónica Magario para seguir como vicegobernadora, la decisión de no respaldar públicamente la candidatura de CFK al PJ, y la organización de un acto propio por el Día de la Lealtad, donde será el único orador.

En el entorno de Kicillof aseguran que “la unidad se ha convertido en sometimiento”, con Cristina y Máximo Kirchner imponiendo su voluntad en la selección de candidatos, lo que solo favorece a La Cámpora y sus aliados. La insatisfacción dentro del espacio de Kicillof ha llevado a contemplar la posibilidad de listas paralelas, lo que implicaría una ruptura dentro de Unión por la Patria (UP).

De cara a las elecciones de 2025, el objetivo es claro: fortalecer el liderazgo de Kicillof y posicionarlo como candidato presidencial. Enfrentarse a La Cámpora y al cristinismo duro es una tarea inevitable. “Máximo solo busca desgastar a Axel”, aseguran fuentes cercanas al gobernador. En este esquema, Kicillof podría liderar su propio espacio político, diferenciándose de la influencia de Cristina Kirchner.

La tensión es palpable, y la fractura en el kirchnerismo parece inevitable. Las elecciones del próximo año serán clave para definir si Kicillof logra consolidar su liderazgo dentro del peronismo o si el poder de Cristina Kirchner sigue siendo el factor dominante en el espacio.