El hijo del presidente de Colombia colaborará con Justicia en caso de corrupción

Nicolás Petro Burgos, hijo mayor del presidente de Colombia, Gustavo Petro, ha aceptado colaborar con la Justicia en el marco de una investigación por supuestos delitos de lavado de activos y enriquecimiento ilícito de servidor público. La imputación de cargos fue realizada por la Fiscalía tras una investigación que se inició en marzo pasado.

La situación se agravó cuando la exesposa de Nicolás Petro, Daysuris Vásquez, reveló a la prensa que el hijo del presidente recibió dinero ilegal destinado a la campaña electoral de su padre, y que dicho dinero fue utilizado para aumentar su propio patrimonio.

Los delitos de lavado de activos y enriquecimiento ilícito conllevan graves consecuencias, con penas que oscilan entre 10 y 30 años de cárcel para el lavado de activos, y de 5 a 10 años para el enriquecimiento ilícito de servidor público.

En una audiencia realizada este martes, Nicolás Petro Burgos manifestó su disposición a colaborar con la Justicia, aunque no admitió formalmente los cargos que se le imputan. "Quiero anunciar a Colombia que hemos decidido iniciar un proceso de colaboración donde me referiré a nuevos hechos y situaciones que ayudarán a la Justicia. Lo hago por mi familia y por mi bebé que viene en camino", expresó Petro Burgos, quien también ejerce como diputado en la Asamblea del Departamento del Atlántico.

Por su parte, la exesposa de Petro, Daysuris Vásquez, ya había mostrado su disposición para colaborar con la Justicia con el objetivo de obtener una posible rebaja de penas.

En un comunicado oficial, la Fiscalía señaló que ambos implicados anunciaron de manera voluntaria su deseo de colaborar con la justicia y proporcionar información relevante que pueda conducir a una terminación anticipada del proceso judicial.

El fiscal primero delegado ante el Tribunal Superior de Bogotá, Mario Burgos, quien lleva el caso, solicitó reforzar la seguridad de Nicolás Petro Burgos, su equipo de defensores y de Daysuris Vásquez. Durante la audiencia, el fiscal cuestionó el origen del patrimonio del hijo del presidente, afirmando que estaba inmerso en una conducta de enriquecimiento ilícito de servidor público.

Esta situación ha generado un gran impacto en la esfera política y judicial del país, y se espera que las declaraciones y colaboración de Nicolás Petro Burgos puedan arrojar luz sobre los hechos investigados y contribuir al esclarecimiento de este delicado caso de corrupción. La sociedad colombiana sigue de cerca este proceso que involucra al hijo de un alto funcionario del Estado y que pone en tela de juicio la transparencia y la ética en la política nacional.