Política

Salarios vs. Inflación: ¿recuperación o ajuste estructural?

La dinámica entre salarios e inflación en la Argentina plantea un desafío crítico para la política económica bonaerense. El último año ha evidenciado una marcada pérdida de poder adquisitivo que afecta a todos los sectores sociales, desde los empleados formales e informales hasta los beneficiarios de ayudas sociales. El impacto, sin embargo, ha sido heterogéneo, generando tensiones políticas y sociales que prometen intensificarse.

Un informe reciente de Fundar señala que, antes de la devaluación de diciembre de 2023, el salario promedio del sector privado registrado alcanzó su nivel más bajo en 14 años. En solo un mes, esa devaluación implicó una pérdida real del 11,4%, la mayor caída mensual en tres décadas. Aunque hubo cierta recuperación hacia septiembre de 2024, el promedio interanual muestra una retracción del 8,4%.

El deterioro no fue uniforme: mientras sectores como el bancario lograron estabilizarse, otros, como Transporte, sufrieron caídas del 21,4%. Esta disparidad responde al ritmo de negociación paritaria y la implementación de ajustes mensuales en algunos convenios.


Impacto social: pobreza y desigualdad


Los ingresos de trabajadores informales cayeron un 19% promedio entre diciembre de 2023 y septiembre de 2024, dejando a millones en una situación de mayor vulnerabilidad. Simultáneamente, la Asignación Universal por Hijo (AUH) mostró un crecimiento nominal del 27%, pero, al incluir la Tarjeta Alimentar, se evidencia una pérdida del 23,8% en términos reales.

El contexto empeora con un incremento del 30% en la tasa de pobreza y la duplicación de la indigencia, según datos del INDEC. En tanto, los beneficiarios del Plan Volver al Trabajo experimentaron una caída del 46% en su poder adquisitivo, lo que refleja una desarticulación en la ayuda social.


El sector público y las jubilaciones: los más golpeados


En el sector público, la caída salarial promedio entre noviembre de 2023 y septiembre de 2024 fue del 16%, duplicando en algunos casos el deterioro registrado en el sector privado. Los docentes universitarios, por ejemplo, enfrentaron recortes de hasta el 30,3%.

En cuanto a los jubilados, aquellos con haberes mínimos lograron una recuperación parcial debido a ajustes atados al IPC, pero quienes perciben montos superiores experimentaron caídas del 16% al 25%, según el tramo.


Perspectivas: desinflación y freno salarial


El alivio en la inflación de octubre, que cayó por debajo del 3%, abre una puerta a la recuperación salarial. Sin embargo, especialistas como Joan Manuel Vezzato, de Fundar, advierten que las mejoras serán limitadas y focalizadas en sectores formales. Los trabajadores informales, los docentes y los beneficiarios de planes sociales seguirán rezagados.

Para la provincia de Buenos Aires, las tensiones entre los reclamos salariales y las restricciones fiscales parecen inevitablemente destinadas a escalar. Con un 2024 marcado por el ajuste y la negociación sectorial, las respuestas políticas se convierten en un eje clave para evitar una mayor fragmentación social.

La relación entre salarios e inflación sigue siendo un tema candente en la política bonaerense y nacional. La recuperación de ingresos será insuficiente sin un cambio estructural que permita reducir la desigualdad. En este contexto, la presión sobre los gremios, los movimientos sociales y el gobierno solo irá en aumento.