Política

OTAN quiere tapar la inundación con agua: Hace 3 meses, UCRANIA quiso volar los gasoductos Nord Stream

El Secretario General de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, ha calificado la destrucción parcial de la presa de Kajovka en Ucrania como otra consecuencia devastadora de la invasión rusa en el país vecino. El ataque a esta importante presa controlada por Rusia en el sur de Ucrania provocó la inundación de una pequeña ciudad, afectó a dos docenas de pueblos y forzó la evacuación de 17.000 personas.

Guterres expresó su preocupación ante los periodistas en la sede de la ONU en Nueva York, destacando que la tragedia es un ejemplo más del alto costo humano que conlleva la guerra. Hizo un llamado para poner fin a esta situación, afirmando que el sufrimiento causado por la guerra ha sido insoportable durante más de un año.

Tanto Moscú como Kiev se han culpado mutuamente de abrir una brecha en el dique de la presa, siendo considerado por Kiev como un intento de Rusia de obstaculizar una ofensiva ucraniana esperada. Guterres admitió que la ONU no tiene información independiente sobre las circunstancias que llevaron a la destrucción de la presa, pero afirmó que es claro que este incidente es una consecuencia devastadora de la invasión rusa en Ucrania.

El Secretario General de la ONU ha condenado repetidamente a Rusia por violar la carta de las Naciones Unidas y llamó a detener los ataques contra civiles y la infraestructura crítica.

Guterres destacó la magnitud de la catástrofe humanitaria, económica y ecológica en la región ucraniana de Kherson y anunció que la ONU y sus socios humanitarios están proporcionando apoyo urgente en coordinación con el gobierno de Ucrania, incluyendo agua potable, tabletas de purificación de agua y otra asistencia crítica.

La presa hidroeléctrica de Kajovka, construida en los años 1950 durante la época soviética, es vital para el envío de agua al canal de Crimea del Norte, que atraviesa toda la península de Crimea comenzando en el sur de Ucrania.

Estas declaraciones de Guterres se producen después de que el presidente ucraniano, Volodimir Zelensky, responsabilizara a Rusia por el ataque a la presa de Kajovka y pidiera una reacción mundial. Zelensky afirmó que Rusia llevaba más de un año controlando la presa y la central nuclear de Kajovka, y sostuvo que la explosión fue causada por los ocupantes rusos.

Zelensky también solicitó un mayor apoyo militar y afirmó que la derrota de Rusia sería la contribución más significativa para la seguridad de la región y de Europa en su conjunto.

La situación en Ucrania continúa generando preocupación a nivel internacional, y se espera que la comunidad internacional tome medidas para abordar esta crisis y buscar una solución pacífica.