CABA
Moscú vuelve a ser blanco de ataques con drones: Autoridades en alerta máxima
En un incidente que ha puesto en alerta máxima a las autoridades rusas, la capital de Rusia, Moscú, fue nuevamente blanco de ataques con drones en la mañana de hoy. Tres drones lanzados desde el Mar Negro atacaron la ciudad, resultando en el cierre temporal de uno de los principales aeropuertos de la capital.
Según el Kremlin, dos de los drones fueron interceptados por sistemas de defensa, mientras que el tercero impactó un edificio en un barrio de negocios de la ciudad. Afortunadamente, no se reportaron víctimas fatales en el ataque.
Aunque Ucrania no ha reconocido públicamente su autoría en estos actos, las tensiones entre ambas naciones han aumentado en las últimas semanas, con una serie de ataques con aviones no tripulados en territorio ruso en paralelo con una difícil contraofensiva en el este y sur de Ucrania, zonas actualmente ocupadas por el ejército ruso.
Los detalles del ataque revelan que uno de los drones fue neutralizado antes de alcanzar su objetivo, estrellándose en el distrito de negocios de Moscú. Sin embargo, otro dron impactó en un rascacielos, causando daños considerables en la fachada y rompiendo ventanas en un área de 150 metros cuadrados. Este edificio ya había sido dañado por un ataque con dron el fin de semana anterior.
Las autoridades rusas informaron que dos drones más fueron destruidos por la defensa aérea en las regiones de Odintsóvo y Naro-Fominsk, cercanas a Moscú. El aeropuerto internacional Vnúkovo de la ciudad también fue cerrado brevemente, afectando las operaciones aéreas.
Por su parte, el ejército ruso aseguró haber repelido un ataque de tres drones navales en el Mar Negro durante la noche. Esta zona ha estado en tensión desde que Rusia se retiró del acuerdo de exportación de cereales en julio.
Los ataques a la capital rusa y sus alrededores se han incrementado a lo largo del año, con uno de ellos alcanzando incluso el Kremlin en mayo pasado. Además, se han registrado varios ataques contra la península de Crimea, territorio anexado por Rusia en 2014, afectando puentes clave para el suministro de las fuerzas rusas involucradas en el conflicto con Ucrania.
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, comentó que "la guerra está volviendo al territorio de Rusia". En la región rusa de Bélgorod, fronteriza con Ucrania, se han reportado nuevos ataques de artillería.
La contraofensiva lanzada por Ucrania en junio, equipada con tecnología occidental, busca recuperar los territorios ocupados por Rusia. Sin embargo, el progreso ha sido lento debido a las fuertes líneas defensivas rusas, compuestas por trincheras, trampas antitanque y campos de minas.
El presidente ruso, Vladimir Putin, ha afirmado reiteradamente que la ofensiva ucraniana ha fracasado. Recientemente, se enfrentó a una insólita rebelión armada de las tropas del grupo paramilitar Wagner contra la jerarquía militar.
Mientras tanto, el ejército ruso continúa mostrando su solidez en el conflicto y transmitió imágenes del jefe del Estado Mayor y comandante de operaciones en Ucrania, Valery Gerasimov, inspeccionando un puesto de mando en la parte ocupada de la región ucraniana de Zaporiyia.
En medio de esta creciente tensión, el ministro de Defensa ruso, Serguéi Shoigú, anunció que Rusia sigue intensificando sus bombardeos, y recientemente, la ciudad natal del presidente ucraniano, Krivói Rog, en el centro del país, fue blanco de dos misiles rusos que resultaron en la muerte de seis personas, incluida una niña de 10 años y su madre, y dejaron 75 heridos.
Las autoridades rusas y la comunidad internacional están atentas ante el incremento de los ataques con drones y la escalada de la situación en la región, mientras se busca una posible solución diplomática para poner fin al conflicto.