Xi Jinping lucha por convencer a China de su plan económico

La consolidación del poder de Xi Jinping en China ha allanado el camino para un cambio en el modelo de crecimiento económico, pero enfrenta resistencia interna. A medida que la economía china se desacelera, el abandono de Xi de los estímulos generales genera descontento entre la población.

El Monitor de Disidencia de China informa que las protestas económicas han aumentado, con focos en disputas laborales y la crisis inmobiliaria. Incluso los inversores minoristas han criticado abiertamente la gestión económica del gobierno, reflejando la frustración generalizada.

Los recortes salariales entre los funcionarios públicos y la falta de claridad sobre el rumbo económico de Xi están generando desilusión. Aunque Xi ha acumulado un poder considerable, el malestar económico podría socavar su confianza y dificultar la implementación de sus políticas.

A pesar de los desafíos, el liderazgo chino parece confiado en su estrategia económica. Sin embargo, el fracaso en comunicar una hoja de ruta clara y la falta de consenso interno podrían obstaculizar sus esfuerzos por transformar la economía china.