La invasión de Rusia en Ucrania ha cobrado un terrible precio en vidas humanas, con cientos de miles de personas fallecidas. A pesar de los esfuerzos por ocultar la información, un estudio realizado por Meduza y Mediazona junto con el investigador Dmytro Kobak ha revelado cifras impactantes sobre las pérdidas en ambos bandos.
El estudio, basado en datos del Registro de Casos de Sucesiones y estadísticas del Servicio Estatal Federal de Estadística, arrojó que desde el inicio de la guerra hasta finales de 2023, se estima que han fallecido alrededor de 75,000 personas. Además, se estima que 47,000 soldados rusos perdieron la vida en el conflicto.
Durante la batalla de Bajmut en 2023, se registraron hasta 2,000 muertes por semana, con un alto número de ex prisioneros entre las víctimas. A pesar del fin de esta operación, las pérdidas continuaron en niveles preocupantes, superando las cifras del inicio del conflicto.
Las autoridades rusas han implementado leyes de censura para evitar la divulgación de información sobre las bajas militares, lo que ha dificultado el acceso a datos precisos. Mientras tanto, en Ucrania, se están llevando a cabo proyectos para honrar la memoria de los caídos y se publican listas detalladas de los fallecidos.
Aunque las cifras de pérdidas ucranianas son más completas que las rusas, aún hay desafíos para obtener datos precisos. Sin embargo, es evidente que el conflicto ha dejado una huella devastadora en ambos países y subraya la urgencia de encontrar una solución pacífica al conflicto.