Hay una historia que vuelve a aparecer cada vez que alguien busca entender cómo se mueve la plata del Estado. Esta vez, el nombre que resuena es el de Luis Alberto “Chiche” Peluso. Si te suena, es porque supo ser funcionario durante la gestión de Daniel Scioli en la Provincia de Buenos Aires, manejando nada menos que el Instituto de Lotería y Casinos. Pero hoy el foco está en otro lado: los contratos millonarios que su empresa, Linser Sacis, viene cosechando a un ritmo imparable.

En lo que va de 2024, Linser Sacis duplicó la cantidad de contratos públicos que tenía el año pasado. Y ya arrancó 2025 con adjudicaciones millonarias, varias de ellas provenientes de organismos vinculados a Scioli, que ahora ocupa un lugar clave como secretario de Turismo, Ambiente y Deportes del gobierno nacional.

El caso más llamativo fue el del 6 de febrero: ANSES le adjudicó a Linser cinco contratos por un total de $17.827 millones para hacerse cargo de la limpieza de oficinas en varias zonas del país, desde CABA hasta el litoral. En total, solo en 2024, Linser ganó 20 licitaciones. En 2023 habían sido 10. En 2022, apenas 7.

¿Y los precios? Llamativamente, la empresa de Peluso no ofreció las propuestas más baratas. Sin embargo, fue elegida en la mayoría de los concursos. ¿La razón oficial? Que sus ofertas cumplían mejor con los requisitos técnicos. Esa explicación se repitió en por lo menos ocho licitaciones de distintos organismos.

Desde el entorno estatal dicen que “las propuestas técnicas fueron mejores”, pero en los pasillos muchos recuerdan la vieja relación de Peluso con Scioli. Incluso hay registros donde otra empresa vinculada a Peluso, llamada Samarcom, comparte domicilio con una sociedad encabezada por un familiar político del exgobernador.

No es la primera vez que la familia Peluso aparece ligada a negocios con el Estado. El hermano de Luis, Norberto Peluso, maneja otra firma de limpieza: Limpiolux. En 2024 no tuvo la misma suerte: solo ganó un contrato chico, aunque ahora apunta a una licitación grande en el Ministerio de Economía.

Eso sí: Limpiolux arrastra su propio prontuario. En 2019, fue elevada a juicio una causa por sobreprecios donde se investiga si hubo direccionamiento en contrataciones. La justicia sigue sin poner fecha para ese juicio, y mientras tanto, las empresas siguen funcionando.

Por si fuera poco, la causa por presunta corrupción contra Luis Peluso cuando manejaba Loterías bonaerenses prescribió en 2017. Lo acusaban de esconder una propiedad en Miami y manejar una supuesta mesa de dinero en el casino flotante de Puerto Madero. Sin causas judiciales activas, su nombre sigue presente en cada pliego que se adjudica.

¿Coincidencia o estrategia? Lo cierto es que Linser Sacis crece con velocidad. Con contratos millonarios, vínculos intactos y antecedentes que siguen dando que hablar.