

Con la confirmación de que Cristina Kirchner será candidata a diputada provincial por la Tercera sección electoral, el escenario bonaerense comenzó a definirse. Su decisión no solo nacionaliza la pelea en ese distrito clave, sino que también condiciona el armado de listas en el resto de la provincia.
En ese contexto, el sector que responde a la titular del PJ nacional ya mueve sus piezas: busca negociar con el gobernador Axel Kicillof —y eventualmente con otros espacios del peronismo— desde una posición de fuerza, ofreciendo "candidaturas conocidas" en varias secciones electorales.
El desafío será conformar listas en las ocho secciones bonaerenses, en un clima de discusión sobre la unidad del peronismo y frente a la amenaza del acuerdo electoral entre La Libertad Avanza y el PRO.
Uno de los distritos clave es la Quinta sección electoral, que este año renueva cinco bancas en el Senado bonaerense.
El kirchnerismo tiene allí a Fernanda Raverta, ex titular de ANSES, como su figura más fuerte.
También propone los nombres de Gustavo Barrera (intendente de Villa Gesell) y Jorge Paredi (ex intendente de Mar Chiquita).
La banca que deja Pablo Obeid (esposo de Raverta) estará en juego.
En el acuerdo LLA-PRO, Guillermo Montenegro, intendente de Mar del Plata, también busca posicionarse. Además, la UCR juega su carta con el senador nacional Maximiliano Abad y con Ariel Bordaisco, quien busca renovar su banca provincial.
Por fuera de Mar del Plata, otro actor de peso en la región es el diputado nacional Rogelio Iparraguirre, referente de Tandil.
En la Sexta sección, que abarca el sur de la provincia y elige seis senadores, el peso electoral de Bahía Blanca es central (40% del padrón de la sección).
El intendente bahiense Federico Susbielles es hoy el referente cristinista en la zona.
Susbielles, cercano a Cristina, podría tener fuerte influencia en el armado de la lista seccional.
En la Séptima sección —que elige tres senadores— La Cámpora tiene presencia en los dos distritos de mayor peso:
Maximiliano Wesner (intendente de Olavarría)
Nelson Sombra (intendente de Azul)
El operador político del espacio en la sección es César Valicenti, ex diputado provincial.
Por el lado del Movimiento Derecho al Futuro (MDF), se menciona a Gustavo Cocconi (Tapalqué). El massismo impulsa al intendente de Roque Pérez. La UCR y LLA gobiernan la mayoría de los distritos restantes.
La Primera sección electoral, con más de 5,3 millones de electores, también podría nacionalizarse como la Tercera.
El cristinismo controla los municipios de Moreno, Merlo, Malvinas Argentinas, Mercedes, Luján y Hurlingham.
El MDF suma a Ituzaingó, San Martín, Morón, José C. Paz, Pilar y General Rodríguez.
En paralelo, crece la posibilidad de que Sergio Massa sea candidato a senador provincial por esta sección, lo que le daría un alto perfil a la campaña oficialista.
Desde el PRO, suena el nombre de Diego Santilli como posible cabeza de lista por el acuerdo LLA-PRO. Otro posible postulante del peronismo en unidad sería Federico Achaval, intendente de Pilar. El kicillofismo, a su vez, impulsa la figura del ministro de Infraestructura Gabriel Katopodis, proyectado también como carta para la sucesión de Kicillof en 2027.
En la Segunda sección, el cristinismo tiene como referentes a:
Sergio Berni, senador provincial y ex ministro de Seguridad
Agustina Propato, diputada nacional
Ambos concentran fuerza en Zárate y San Nicolás, donde la dirigente camporista Cecilia Comerio es otra figura clave.
En la Cuarta sección, el MDF apuesta a un despliegue territorial con intendentes propios, aunque en la ciudad cabecera, Junín, gobierna el PRO.
Por último, la Octava sección electoral (ciudad de La Plata) muestra un panorama favorable al MDF:
El intendente Julio Alak es uno de los aliados más firmes de Kicillof y mantiene buen diálogo con Cristina y Máximo Kirchner.
Para encabezar la lista de diputados en la sección (seis bancas en juego), suena el nombre de Carlos Bianco, ministro de Gobierno bonaerense.
"Va a ser una elección muy difícil y necesitamos a los mejores candidatos. Si vamos juntos, será más fácil ganar; si vamos divididos, no hay chances", expresó días atrás el intendente de Ezeiza, Gastón Granados, alineado con Cristina.
El desafío, en definitiva, es doble: asegurar la unidad del peronismo bonaerense y construir listas con figuras de peso que respalden la candidatura de CFK en la Tercera sección y el armado en el resto de la provincia.
Con La Libertad Avanza y el PRO como adversarios y un escenario electoral muy competitivo, el cristinismo juega sus cartas para llegar bien posicionado a la pulseada bonaerense de este año.