El caso involucra a Gustavo Scaglione, un empresario rosarino y dueño del diario La Capital, y a Juanita Tinelli, la hija menor del conductor. Lo que comenzó como una denuncia por una llamada intimidante, derivó en un conflicto judicial y económico que ya venía escalando en silencio.
Según la denuncia judicial, Juanita Tinelli contó que recibió un mensaje intimidante desde un número oculto. La persona al otro lado del teléfono se presentó con nombre y apellido: “Soy Gustavo Scaglione. Tu papá me conoce muy bien. Vos y toda tu familia se tienen que cuidar mucho, mucho”. Nerviosa por la situación, borró el registro de la llamada.

El dato que más llamó la atención fue que el supuesto autor del mensaje no ocultó su identidad. Esa particularidad encendió las dudas sobre la veracidad de la amenaza.
El abogado Juan Villanueva, representante de la hija de Marcelo Tinelli, explicó al diario La Nación que la denuncia no apunta directamente a Scaglione:
“Ella no menciona a Scaglione; la persona que llamó le dijo ‘Hola, soy Gustavo Scaglione’. Es muy poco probable que alguien que amenaza diga quién es. No está denunciado Scaglione”, aclaró el letrado.
Así, el caso quedó abierto a investigación mientras la Justicia intenta determinar quién realizó la llamada.
Por su parte, Gustavo Scaglione negó rotundamente haber amenazado a la joven. “De ninguna manera amenacé a Juanita Tinelli. Voy a accionar legalmente porque me están difamando”, afirmó el empresario rosarino en un programa de TV.
Scaglione aseguró que ya derivó el caso a sus abogados:
“Ya le pasé todo a mis abogados para que se ocupen de esta falsa denuncia. Ahora voy a ejecutarle todo”, dijo, en alusión a una deuda millonaria que mantiene con Marcelo Tinelli.
El enfrentamiento entre Tinelli y Scaglione tiene antecedentes financieros. Hace semanas, se conoció que el empresario había embargado la chacra de Punta del Este que el conductor había vendido, pese a estar en garantía de una deuda.
El embargo rondaba los 2,5 millones de dólares, aunque fuentes cercanas estiman que el monto total de la deuda ascendería a 6,5 millones.
La denuncia por amenaza y la disputa económica colocaron a ambas familias en el centro de la escena mediática. Mientras Juanita Tinelli busca cerrar el episodio y dejar atrás el miedo, Gustavo Scaglione avanza con sus abogados para limpiar su nombre.
Lo cierto es que el caso abrió más preguntas que respuestas: ¿quién llamó realmente a la hija de Tinelli? La investigación judicial recién empieza, y el misterio todavía sigue abierto.