¿Qué busca realmente Mauricio Macri con la reunión del PRO? Esa es la pregunta que muchos se hacen en medio del revuelo político que atraviesa el espacio amarillo. Este miércoles, a las 10 de la mañana, el expresidente encabezará un encuentro clave del Consejo Nacional del PRO en la sede de Balcarce, con un objetivo que promete sacudir el tablero político: redefinir el rumbo del partido frente al avance del oficialismo libertario en el Congreso.
La cita llega en un momento de máxima tensión con Javier Milei. El pase de legisladores del PRO hacia La Libertad Avanza (LLA) y los recientes cambios en el gabinete nacional encendieron las alarmas dentro del espacio macrista. Por eso, Macri decidió mover las piezas y convocar a una cumbre ampliada con los 24 presidentes provinciales, diputados, senadores y dirigentes nacionales del partido.

El objetivo central: ordenar la interna y definir la estrategia parlamentaria frente a un Gobierno que concentra poder y polariza el escenario político.
El eje de la reunión será el futuro del vínculo con La Libertad Avanza. Hay sectores del PRO que impulsan un acuerdo estable para garantizar la gobernabilidad, mientras otros alertan sobre el riesgo de “diluir la identidad” del partido frente al empuje libertario.
En ese contexto, Macri busca encontrar el punto justo: mantener influencia en la agenda legislativa sin convertirse en una extensión del oficialismo. La idea es construir una alianza táctica en el Congreso, capaz de acompañar proyectos que beneficien al país, pero sin perder el rol opositor.
Además de la estrategia nacional, el expresidente pondrá bajo la lupa la situación del PRO en cada provincia. El caso más delicado es el de Córdoba, donde la Justicia suspendió la intervención partidaria y las disputas internas no ceden. Ese conflicto será uno de los temas que Macri buscará encauzar para evitar que las divisiones provinciales afecten el armado nacional.
También se analizará la preparación del partido para las elecciones legislativas de 2025, un test clave que definirá el peso político del PRO en un escenario cada vez más polarizado entre Milei y el peronismo.
La cumbre de Balcarce no será una reunión más. Representa un punto de inflexión para un partido que necesita reordenarse y definir si su futuro estará más cerca de acompañar al Gobierno libertario o de reconstruir una identidad opositora propia.
El desenlace de esta reunión podría marcar el nuevo equilibrio político dentro del Congreso. Y aunque Macri no lo diga abiertamente, lo que está en juego no es solo el rumbo del PRO, sino su propio liderazgo dentro del espacio.