¿Qué hay detrás de los cientos de menciones a Gustavo Bordet en las conversaciones de una causa por presunta corrupción que involucra a empresarios y funcionarios de Entre Ríos? La Justicia intenta responderlo desde hace meses, mientras la trama de la causa Securitas sigue revelando vínculos, nombres y favores que salpican a más de un dirigente.
La historia arranca en 2024, cuando una auditoría interna de la empresa de seguridad Securitas detectó maniobras sospechosas: pagos ilegales para asegurarse contratos con organismos públicos. Uno de los entes señalados fue la distribuidora estatal Enersa. A partir de ahí, la jueza Sandra Arroyo Salgado ordenó detener a los hermanos Claudio y Marcelo Tortul, gerentes acusados de manejar la red de coimas.

De sus celulares salieron más de 25 mil páginas de conversaciones. En ellas, el nombre de Gustavo Bordet, exgobernador entrerriano, aparece citado 98 veces. También figura su exsecretario Legal y Técnico, José Gervasio Laporte, conocido como “El Negro”, quien falleció en 2020. En uno de los chats, los Tortul hablaban de cómo repartir “los 10 palos” de Enersa, mencionando siglas y apodos que apuntarían a funcionarios del entorno provincial.
Entre los nombres que surgen están Jorge González, entonces presidente de Enersa; Juan Carlos Pimentel, Alejandro Cis, Marcelo Morales, Marco Aldana y Ramiro Caminos. Algunos fueron procesados, otros absueltos. Todos aparecen en los mensajes como piezas del mismo engranaje.
En un correo del 28 de enero de 2019, Claudio Tortul escribió que “la semana que viene tenemos que pagar la parte de Bordet”. El mail coincidió con una reunión en la casa de Laporte, donde —según los chats— se habló del “auto de Bordet”. Ese vehículo sería un Toyota Etios, mencionado como parte de las supuestas gestiones del funcionario fallecido.
Con el tiempo, el nombre “Hugo” reemplazó al de Laporte en los intercambios. Los investigadores creen que podría tratarse de Hugo Ballay, exministro de Economía durante la gestión Bordet. “Habla con Bordet y me dice que sí”, escribió Tortul en un chat de febrero de 2022.
Ante las filtraciones, Bordet rompió el silencio. “No formé parte de ningún sistema de coimas ni tuve vínculo con los hermanos Tortul ni con Securitas”, aseguró en un comunicado. “Confío en que la Justicia avance con independencia”, cerró el actual diputado nacional.
Mientras tanto, la causa Securitas sigue su curso. Y aunque el exmandatario no fue procesado, su nombre sigue resonando en un expediente donde las conversaciones pesan tanto como las pruebas. El tiempo dirá si solo fue una mención al pasar… o algo más profundo.