¿Qué implica realmente la intervención cardíaca a la que será sometido Juan Schiaretti y cómo puede impactar en su actividad política? Vamos paso a paso para aclararlo sin vueltas.
El exgobernador de Córdoba y diputado nacional electo por Provincias Unidas, Juan Schiaretti, confirmó que el viernes 28 de noviembre será sometido a una operación cardíaca programada. El procedimiento consiste en reemplazar su válvula aórtica, una de las cuatro válvulas que ordenan el flujo de sangre dentro del corazón.
Este viernes 28 seré sometido a una intervención cardíaca que consiste en la sustitución de la válvula aórtica mediante cateterismo.
— Juan Schiaretti (@JSchiaretti) November 24, 2025
Por recomendación médica, el procedimiento fue programado y se realizará en la Fundación Favaloro de la ciudad de Buenos Aires.
Según explicó él mismo, la intervención será mínimamente invasiva y se realizará por cateterismo en la Fundación Favaloro, en la Ciudad de Buenos Aires. Esto quiere decir que no le harán una cirugía abierta, sino que ingresarán por una pequeña incisión para colocar la nueva válvula.
¿Por qué se reemplaza la válvula aórtica?
La válvula aórtica es clave porque permite que la sangre salga del corazón hacia el resto del cuerpo. Cuando se estrecha (estenosis) o pierde la capacidad de cerrar bien (regurgitación), el corazón se esfuerza de más y aparece la necesidad de un reemplazo.
En estos casos, los médicos pueden usar válvulas mecánicas —hechas con materiales sintéticos— o válvulas biológicas —fabricadas con tejidos de origen animal o del propio paciente—. El tipo de válvula depende de cada cuadro clínico, pero en todos los casos el objetivo es el mismo: que el corazón vuelva a trabajar con normalidad.
¿Por qué no hará una cirugía abierta?
Hasta hace algunos años, estos reemplazos se hacían abriendo el esternón. Era un procedimiento efectivo, pero con postoperatorio largo y doloroso. Ahora, gracias a técnicas menos invasivas, se puede hacer por cateterismo: una vía que requiere cortes mucho más pequeños y permite una recuperación más rápida.
De hecho, este es el método elegido para Schiaretti, lo que reduce riesgos y tiempos de internación.
¿Cómo es la recuperación?
El postoperatorio de un reemplazo valvular por cateterismo suele ser corto: entre tres y cuatro días de internación en la clínica, y luego una recuperación progresiva, bastante más ágil que la de una cirugía abierta tradicional.
Si todo avanza normalmente —como suele pasar en este tipo de intervenciones programadas—, no habría impedimentos para que Schiaretti asuma la banca que ganó en las últimas elecciones nacionales.
¿Qué significa esto para su futuro político?
Acá volvemos al interrogante del inicio: la intervención es seria, pero el procedimiento elegido y el pronóstico habitual permiten anticipar que su actividad política no se vería comprometida. Lo central es que se trata de una operación planificada, con alto índice de éxito y con rápida vuelta a la rutina.
Ahora sí: la intriga inicial queda resuelta. Se trata de un procedimiento relevante, pero con una recuperación favorable y prevista.
