Algo cambió fuerte en Chile este domingo y todavía se están acomodando las piezas. El resultado fue claro, pero la pregunta que muchos se hacen recién empieza a aparecer: ¿qué significa realmente esta elección y por qué marca un antes y un después en el país vecino?
José Antonio Kast será el próximo presidente de la República de Chile tras imponerse en el balotaje a la candidata de izquierda Jeannette Jara. El líder del Partido Republicano obtuvo el 58% de los votos, casi 20 puntos más que su rival, que alcanzó el 42%, según el conteo oficial.
LA IZQUIERDA RETROCEDE
— Javier Milei (@JMilei) December 14, 2025
LA LIBERTAD AVANZA
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Se trata de una de las victorias más amplias desde el regreso de la democracia chilena. Solo fue superada, en términos porcentuales, por el triunfo de Michelle Bachelet en 2014. El dato no es menor: muestra un respaldo contundente a una figura que representa un giro político claro.
Minutos después de conocerse el resultado, Jeannette Jara reconoció la derrota en redes sociales. “La democracia habló fuerte y claro”, escribió, y confirmó que se comunicó con el presidente electo para desearle éxito “por el bien de Chile”. También aseguró que seguirá trabajando por una mejor vida para el país.
¿Quién es José Antonio Kast y qué propone? Es un dirigente de perfil conservador, abiertamente pinochetista, que construyó su carrera política con un discurso duro sobre dos temas que preocupan a gran parte de la sociedad chilena: la migración irregular y la inseguridad. Desde ese lugar logró capitalizar el descontento con el actual gobierno de Gabriel Boric.
Kast se opone al aborto y al matrimonio igualitario, y sostiene posturas nacionalistas en política exterior, especialmente en temas de soberanía. Estas posiciones generan apoyos firmes, pero también alertas en sectores que miran con atención el vínculo regional, incluida la relación con Argentina.
La elección también se lee en clave regional. La victoria de Kast confirma un corrimiento hacia la derecha en parte de América Latina y dialoga con otros liderazgos del mismo signo ideológico. En ese mapa aparece el presidente argentino Milei, con quien comparte afinidades en el discurso político, aunque aún está por verse cómo será el vínculo concreto entre ambos gobiernos.
Desde Buenos Aires, la Cancillería argentina emitió un comunicado donde expresó su voluntad de trabajar con las nuevas autoridades chilenas en la defensa de la democracia, la cooperación bilateral y temas clave como la lucha contra el narcotráfico, el comercio y las inversiones.
Al cierre de la jornada electoral, el presidente saliente Gabriel Boric cumplió con la tradición del “telefonazo” y habló con José Antonio Kast, dando inicio formal al proceso de transición hasta la asunción en marzo.
El resultado ya está definido. Ahora, la incógnita es cómo impactará este cambio político en Chile y en la región en los próximos años.
