Durante décadas, la existencia de la 'Mona Lisa de Isleworth', una supuesta versión más joven y feliz de la obra maestra de Leonardo da Vinci, ha intrigado a expertos. Adquirida en 1913 por el marchante de arte Hugh Blaker, el cuadro ha pasado por manos de coleccionistas y ha permanecido oculto en una cámara acorazada durante 40 años.
Ahora, la Fundación Mona Lisa, con sede en Suiza, presenta la pintura en la galería Promotrice delle Belle Arti de Turín bajo el título audaz de 'La primera Mona Lisa'. Joël Feldman, secretario general de la fundación, asegura que han demostrado más allá de toda duda razonable que Leonardo pintó dos Mona Lisas, siendo esta la única candidata a ser la segunda.
La exposición incluye pruebas científicas que respaldan la afirmación de la fundación de que la versión de Isleworth se completó una década antes que la del Louvre. Sin embargo, el profesor Martin Kemp de la Universidad de Oxford discrepa, argumentando que la obra no es del maestro renacentista y sugiere que la fundación busca promocionar el retrato para aumentar su valor.
El debate sobre la autenticidad y el origen de la 'Mona Lisa de Isleworth' continúa, y los visitantes tienen la oportunidad de analizar la obra por sí mismos en la exposición "Leonardo Da Vinci - La Prima Monna Lisa" en Turín hasta el 26 de mayo de 2024.