El caso Alfa, conocido por su paso por Gran Hermano, desató una tormenta política y personal que expuso divisiones internas en el movimiento libertario liderado por Javier Milei. ¿Qué pasó entre Delfina Wagner, Lilia Lemoine, y Karina Milei, y cómo esta controversia llegó a salpicar a la política bonaerense? Te contamos todo lo que se sabe.
Según fuentes cercanas, los rumores sobre los acercamientos entre Karina Milei y Alfa agitaron las aguas en La Libertad Avanza. Este vínculo fue señalado como el inicio de una serie de disputas internas. En particular, la interacción entre Delfina Wagner, ex pareja de Alfa, y la diputada Lilia Lemoine escaló rápidamente en las redes sociales.
Lemoine utilizó Twitter para insinuar que Wagner tenía vínculos que podrían ser perjudiciales para el movimiento libertario. “Así infiltran con disidencia controlada al movimiento libertario”, escribió junto a fotos de Wagner con Alfa. Estas acusaciones fueron desmentidas de inmediato por Wagner, quien respondió con dureza, calificando a Lemoine de “gato reventado” y lanzando invitaciones directas para enfrentarse cara a cara.
Delfina Wagner, quien se autodenomina “La Queen”, no tardó en responder a las declaraciones de Lemoine. En una serie de tuits cargados de enojo, negó cualquier vínculo actual con Alfa y exigió respeto. “Yo no estoy en política, no me meto con nadie. Mejor dejá de boquear en Twitter y arreglamos las cosas cara a cara”, escribió Wagner, indicando incluso su domicilio en General Pacheco como lugar para resolver el conflicto.
Además, Wagner redobló las críticas hacia Alfa, llamándolo “viejo rata” y dejando claro que su relación con él había terminado hace más de un año. “Si me tengo que meter, las cosas terminan complicadas”, advirtió.
Mientras tanto, el rol de Karina Milei como mediadora dentro del movimiento libertario quedó en entredicho. Según LPO, su cercanía con Alfa habría generado tensiones que sacaron a la luz problemas organizativos atribuidos a Sebastián Pareja, armador político de La Libertad Avanza en la provincia de Buenos Aires.
La situación no tardó en escalar mediáticamente, y las desavenencias internas pasaron a ser tema de debate tanto en círculos políticos como en redes sociales.
Este episodio no solo refleja un enfrentamiento personal, sino que también expone una interna libertaria que podría afectar la proyección del partido en la provincia de Buenos Aires. Con elecciones en el horizonte, los movimientos de figuras como Karina Milei, Lilia Lemoine, y los vínculos con personajes mediáticos como Alfa generan preguntas sobre el rumbo estratégico de La Libertad Avanza.
El desenlace de este conflicto es incierto, pero una cosa está clara: las diferencias internas entre los libertarios están más expuestas que nunca, y los protagonistas han decidido librar esta batalla a la vista de todos. ¿Será esto un obstáculo o una oportunidad para reconfigurar la unidad del movimiento?
El tiempo dirá si estas tensiones logran resolverse o si, como advierte Wagner, las cosas “terminan complicadas”.