VISIÓN POLÍTICA

Miles de ciudadanos polacos se manifestaron en contra del gobierno conservador Ley y Justicia (PiS), acusándolo de violar el Estado de Derecho y de no abordar la inflación de dos dígitos. La marcha fue liderada por partidos de la oposición, incluido el partido Plataforma Cívica del ex primer ministro Donald Tusk, que ha experimentado un aumento significativo en las encuestas.

La manifestación se produce pocas semanas antes de las elecciones que definirán el futuro de Polonia y en medio de una creciente tensión política. La televisión estatal polaca TVP, que está alineada con el gobierno, ha lanzado una campaña publicitaria que retrata a Tusk como un títere de Alemania y como alguien que trabaja en contra de los intereses de Polonia.

El gobierno polaco acusa a Tusk de haber establecido lazos estrechos con Alemania y Rusia, lo que ha provocado tensiones entre ambos países. Las relaciones entre Alemania y Polonia se deterioraron aún más cuando Varsovia presentó un reclamo de reparaciones de 1.3 billones de euros por los crímenes de lesa humanidad y daños cometidos por Alemania durante la Segunda Guerra Mundial.

Además, recientemente se desató una disputa entre Polonia y Ucrania debido a restricciones comerciales y la interrupción del suministro de armas, lo que ha aumentado la tensión en la región.

Estos acontecimientos están generando una atmósfera política y social turbulenta en Polonia, a solo unas semanas de las elecciones parlamentarias previstas para el 15 de octubre. Los ciudadanos también se enfrentan a desafíos económicos, como el encarecimiento de la energía y el aumento del costo de vida debido a la alta inflación. La elección determinará el rumbo futuro del país, ya sea manteniendo el gobierno actual o eligiendo un cambio de liderazgo.