En medio de un debate creciente sobre el costo y el impacto de los viajes presidenciales, Javier Milei suma su 18º salida al exterior. Esta vez, el mandatario aterrizó en Italia, donde se reunió con la primera ministra Giorgia Meloni y participará en el festival juvenil Atreju, liderado por el partido Fratelli d'Italia. La agenda incluye también encuentros con empresarios y entrevistas que refuerzan su discurso libertario.
Desde su asunción, Milei ha recorrido cerca de 300.000 kilómetros, poniendo en foco las obras de gestión internacional que, según él, buscan posicionar a Argentina en el escenario global. Sin embargo, el uso de vuelos privados, que supera los USD 280.000 por trayecto, generó críticas. Hasta agosto, los gastos totales ascendieron a USD 2,5 millones.
El recorrido internacional de Milei comenzó en enero con su asistencia al Foro Económico Mundial en Davos, Suiza, donde planteó su rechazo a lo que considera "agenda socialista". En febrero, viajó a Israel y luego a Italia para un primer encuentro con Giorgia Meloni. También se reunió con el Papa Francisco en el Vaticano, marcando un momento clave en su estrategia de relaciones internacionales.
Estados Unidos lidera como destino predilecto del presidente, con siete visitas en menos de un año. Entre los eventos destacados se encuentra la Conferencia de Acción Política Conservadora (CPAC) y reuniones con figuras como Elon Musk y Donald Trump. Estas visitas, justificadas por Milei como oportunidades para atraer inversores, han sido cuestionadas por su elevado costo.
Mientras Milei defiende su política exterior como una obra esencial para "abrir mercados" y "promover la libertad", sectores de la oposición y parte de la ciudadanía cuestionan la prioridad que el mandatario le da a sus viajes sobre los problemas locales. En especial, los gastos millonarios en vuelos y estadías han generado críticas por su impacto en las arcas públicas.
El reciente viaje a Italia pone nuevamente a Milei en el centro del escenario político europeo. Giorgia Meloni, conocida por su liderazgo en la derecha conservadora, se ha convertido en una aliada estratégica. Su participación en el festival Atreju busca fortalecer lazos con el Partido Conservadores y Reformistas Europeos, compartiendo visiones sobre soberanía nacional, libre comercio y moneda sólida.
Sin embargo, la intención de generar alianzas también plantea interrogantes sobre cómo estas relaciones beneficiarán directamente a los argentinos, especialmente en términos de inversión y proyectos concretos.
Con 18 viajes realizados, el mandatario deja una marca sin precedentes en cuanto a presencia internacional. Pero la pregunta que persiste es si estas obras en el ámbito diplomático se traducirán en mejoras tangibles para el país. La gestión de Milei sigue dividiendo opiniones, mientras que la balanza entre el costo de sus acciones y sus resultados aún está por definirse.