La reciente decisión de Javier Milei de apartar a la canciller Diana Mondino generó sorpresa en la esfera política. El motivo central fue el voto de Argentina en la Asamblea General de la ONU, donde Mondino apoyó una resolución contra el embargo de Estados Unidos a Cuba, un acto que el presidente consideró contrario a la alineación internacional que su gobierno busca consolidar.

El motivo del despido: Argentina vota contra el embargo

El miércoles, la Asamblea General de la ONU votó una resolución pidiendo el fin del embargo económico y comercial que Estados Unidos mantiene sobre Cuba desde hace más de seis décadas. Argentina se sumó a los 187 países que votaron a favor de esta medida, en contraste con los votos en contra de Estados Unidos e Israel, países a los que Milei ha considerado los principales aliados de su gestión. Aunque no es de cumplimiento obligatorio, esta resolución simboliza un rechazo global hacia las sanciones impuestas a la isla caribeña, argumentando que estas han afectado el acceso de Cuba a recursos básicos.

Sin embargo, el Presidente Milei tomó esta votación como un acto de desacuerdo con la política exterior que considera clave para su gobierno. Según el portavoz presidencial, Manuel Adorni, el mandatario tenía una postura clara de alineación con sus aliados estratégicos en esta cuestión, y el voto de Mondino fue interpretado como una falta de coherencia con esa directriz.

La reacción de Milei y el reemplazo de Mondino

Tras conocerse el resultado en la ONU, el Presidente decidió dar por terminado el rol de Mondino en el gabinete. La canciller había desempeñado un papel activo en la política exterior, pero este voto específico no coincidía con los intereses diplomáticos que el gobierno de Milei busca fortalecer. En un comunicado, Adorni confirmó que la destitución fue motivada por la incompatibilidad de su accionar en la ONU con las metas internacionales de Argentina bajo la administración de Milei.

Para ocupar el puesto de Mondino, se confirmó a Gerardo Werthein, quien anteriormente fue embajador en Estados Unidos. Werthein, que ya ha demostrado su habilidad en el manejo de relaciones diplomáticas con Estados Unidos, es visto como una figura clave para mantener el vínculo que el gobierno argentino desea consolidar con el país norteamericano y con Israel.

El contexto: el embargo y sus implicancias

El embargo estadounidense sobre Cuba ha sido una política de presión hacia el gobierno cubano, que ha recibido críticas por su impacto en la economía y el bienestar de la población. Durante la sesión en la ONU, el canciller cubano, Bruno Rodríguez Parrilla, arremetió contra las sanciones, calificándolas de “medidas inhumanas” y “guerra económica extrema” que, según su perspectiva, buscan desincentivar a los países que apoyan la autonomía cubana. La posición de Argentina, bajo Mondino, de votar contra el embargo buscaba seguir el consenso mundial, pero se convirtió en un detonante dentro del gobierno argentino.

El despido de Mondino demuestra la postura tajante de Milei en cuanto a sus relaciones internacionales. La remoción de la canciller marca un ajuste que el presidente considera necesario para mantener una política exterior alineada con sus principales aliados. La decisión de nombrar a Werthein sugiere un movimiento claro hacia una colaboración más estrecha con Estados Unidos e Israel, dejando atrás posturas que pudieran contradecir esa línea de apoyo.