Luego del lanzamiento de misil balístico hacia el mar de Japón, llevado a cabo por Corea del Norte, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, afirmó que estos programas de misiles nucleares violan el Derecho Internacional. Durante la cumbre en Vilna, Stoltenberg condenó los programas nucleares y de misiles de Corea del Norte, que han violado múltiples resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU. Los líderes aliados también se reunieron con los mandatarios de Japón, Corea del Sur, Australia y Nueva Zelanda, socios de la OTAN en el Indopacífico.

Además del lanzamiento del misil norcoreano, Stoltenberg también expresó su preocupación por el "fuerte refuerzo militar" de China y la modernización y expansión de sus fuerzas nucleares. Destacó la importancia de la seguridad global y cómo los acontecimientos en Asia y Europa están interconectados. El primer ministro japonés, Fumio Kishida, afirmó que en el entorno de seguridad internacional actual, la seguridad de Europa y el Indopacífico son inseparables. Japón y la OTAN acordaron cooperar en áreas adicionales como el ciberespacio, las tecnologías emergentes y la manipulación de la información.

Tras el lanzamiento del misil balístico, el presidente surcoreano, Yoon Suk-yeol, presidió una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad Nacional. Tanto el Ejército surcoreano como el Ministerio de Defensa de Japón recopilaron detalles del lanzamiento para evaluar cualquier riesgo para sus respectivos territorios. La comunidad internacional ha estado siguiendo de cerca los acontecimientos y expresando su preocupación por las acciones de Corea del Norte, que continúa violando el Derecho Internacional con sus programas nucleares y de misiles.

La cumbre de la OTAN en Vilna ha destacado la importancia de la seguridad global y la necesidad de una cooperación estrecha entre los países miembros y sus socios. Los líderes aliados han reafirmado su compromiso de mantener la estabilidad y abordar las amenazas emergentes, tanto en Europa como en el Indopacífico. La cooperación entre Japón y la OTAN se ha fortalecido aún más, abarcando áreas como el ciberespacio, las tecnologías emergentes y la manipulación de la información. La seguridad regional y global sigue siendo una preocupación primordial en el escenario geopolítico actual.