VISIÓN POLÍTICA

Alberto Fernández hizo hablar a los tres ministros que Cristina Kirchner quiere que dejen el Gobierno en la primera reunión de gabinete del año.

Martín Guzmán, Matías Kulfas y Claudio Moroni abrieron la reunión a la que faltaron cuatro ministros. Son justamente los tres apuntados por la vicepresidenta.

Guzmán se refirió a la inflación y dijo que "lo peor ya pasó". Pocas horas después de la reunión, Cristina pareció responder con un tuit en el que felicitó a Sergio Palazzo, líder de La Bancaria, por conseguir un aumento del 60%. No es casual: Guzmán le está pidiendo a las empresas que los aumentos no superen el 50%.

A la reunión no asistieron Matías Lammens, Tristán Bauer, Jorge Ferraresi y Alexis Guerrera. Pero sí estuvo Eduardo "Wado" de Pedro, que llegó una hora tarde por un problema de salud de su hijo y motivó especulaciones en los minutos en los que no aparecía.

En el entorno del presidente dijeron que encomendó a Juan Manzur a que las reuniones de gabinete, que no se realizaban desde noviembre, se realicen cada 15 días. Cerca de Manzur dijeron a este medio que la iniciativa fue del propio Manzur para mantener la regularidad.

"Nosotros no odiamos a nadie", dijo Manzur luego de la reunión en respuesta a Sergio Berni, que antes de la reunión se preguntó "¿Cómo puede terminar un Gabinete que los une el odio a Cristina?.

"Hay que defender a este Gobierno, al que no le gusta, que se vaya", dijo Manzur durante la reunión a los ministros.