¿Qué hay detrás de la posible vuelta de Juan Schiaretti a la escena política nacional? La posible suspensión de las PASO en el Senado podría cambiar el tablero en Córdoba y a nivel nacional, dejando al exgobernador en una posición clave para una candidatura a diputado. Pero ¿es tan simple como parece?
El peronismo cordobés, históricamente distante del kirchnerismo, ve en la eliminación de las Primarias una oportunidad para consolidar su poder. La jugada de los diputados peronistas que desmarcaron al bloque de Unión por la Patria la semana pasada podría sellarse en el Senado, marcando el fin del modelo K en la provincia. La pregunta es si Schiaretti está listo para capitalizar este momento.
Con un calendario electoral más corto, los partidos deben adaptarse rápidamente. Sin las PASO, la oposición enfrenta nuevos desafíos. “¿Para qué necesitarían los libertarios a los radicales si con el sello del 'Peluca' Milei pueden ganar solos?”, comenta un referente cercano a Martín Llaryora, actual gobernador. Mientras tanto, figuras como Rodrigo de Loredo y Luis Juez buscan su propio espacio, complicando aún más el panorama opositor.
Sin embargo, dentro del oficialismo cordobés la posible candidatura de Schiaretti no garantiza tranquilidad. Tras más de 25 años de gobierno peronista en la provincia, las tensiones internas son evidentes. La transición de poder a Llaryora no fue del todo pacífica, y la ausencia de Alejandra Vigo, esposa de Schiaretti, en la apertura de sesiones de la Legislatura provincial fue un claro síntoma de estas fricciones.
Mientras algunos en el schiarettismo ven una victoria en octubre como un trampolín para que el exgobernador busque un cuarto mandato en 2027, otros en el llaryorismo descartan esta posibilidad y ya trabajan en un "plan B". Este plan incluye a Miguel Siciliano, jefe del bloque oficialista en la Unicameral, quien ha ganado visibilidad enfrentando a la oposición y podría liderar la boleta.
La incertidumbre también se extiende a otros referentes del PJ cordobés. Natalia de la Sota, hija del exgobernador, ya manifestó su intención de renovar su banca en el Congreso. Su crítica al gobierno de Milei y su cercanía con Sergio Massa la posicionan como una figura a seguir, especialmente si la situación económica se deteriora.
Además, Llaryora busca fortalecer lazos en el sur de la provincia, desde Río Cuarto hacia abajo. Figuras como Manuel Calvo, ministro de Gobierno, y los ministros Julián López y Sergio Busso podrían jugar un rol clave en esta estrategia. El intendente de Río Cuarto, Guillermo De Rivas, también está en la mira del Centro Cívico por su gestión destacada.
En este contexto, la suspensión de las PASO no solo reconfigura las alianzas dentro del peronismo cordobés, sino que también complica a la oposición y abre un abanico de posibilidades para Schiaretti y su entorno. La decisión final podría cambiar el curso de la política en Córdoba y, quién sabe, tal vez también a nivel nacional.
