Cristina Kirchner propone reformar la Constitución: ¿un cambio necesario para Argentina?
En una reciente entrevista, la expresidenta Cristina Kirchner abrió el debate sobre la posibilidad de reformar la Constitución argentina, argumentando que el país necesita elecciones menos frecuentes y ajustes en los mandatos políticos. Esta declaración se suma a sus ya conocidas críticas al Poder Judicial y a la gestión actual de Javier Milei, el flamante presidente de la nación. Pero, ¿cuál es la propuesta de Cristina y cómo se conecta con las obras de gobierno y los desafíos políticos actuales?
Para Cristina, el actual sistema electoral argentino tiene un problema clave: las elecciones cada dos años. Según ella, este esquema interrumpe los ciclos de gestión y dificulta la planificación de políticas públicas de largo plazo. “Tiene que haber elecciones cada cuatro años. Hay que acomodar los mandatos para que duren ese tiempo”, declaró.
La expresidenta enfatizó que aunque no existen “los números” necesarios en el Congreso para una reforma constitucional, la “necesidad” de este cambio es evidente. Esta propuesta no solo busca reorganizar los tiempos electorales, sino también brindar mayor estabilidad política, lo que podría impactar directamente en la planificación y ejecución de obras públicas de gran envergadura.
Cristina no evitó referirse al presidente Javier Milei y al rol de los bloques opositores en el Congreso. Negó rotundamente cualquier tipo de pacto entre el kirchnerismo y La Libertad Avanza, afirmando que es el PRO y los bloques dialoguistas quienes “le permiten a Milei hacer cualquier cosa”.
“Son ellos los que votan con Milei en temas como los jubilados y las prepagas. Pero nos acusan a nosotros de pactar. Es una gran caradurez”, afirmó, en un mensaje cargado de tensión política.
En su intervención, Cristina también arremetió contra el sistema judicial argentino. “El Poder Judicial tiene una rémora monárquica. Es el único poder que, una vez nombrado, dura toda la vida”, cuestionó, al tiempo que sugirió explorar modelos como el de México, donde los jueces son elegidos por voto popular.
Según ella, el actual sistema judicial está “mal politizado” y requiere una transformación profunda para garantizar su independencia y efectividad. Esta idea podría ser central en una eventual reforma constitucional.
La propuesta de Cristina Kirchner tiene un trasfondo que toca áreas clave como las obras públicas. Al reducir la frecuencia de las elecciones, los gobiernos podrían enfocarse más en la planificación y ejecución de proyectos a largo plazo, sin interrupciones constantes por campañas electorales.
Sin embargo, la expresidenta también enfrenta cuestionamientos. La causa Cuadernos, que investiga presuntas irregularidades en la gestión de obras durante su mandato, sigue avanzando en la Justicia, sumando un contexto de tensiones políticas y judiciales.
Reformar la Constitución no es un proceso sencillo. Requiere acuerdos políticos amplios y una movilización social significativa. Aunque hoy la posibilidad parece lejana, la propuesta de Cristina Kirchner busca instalar en el debate público la necesidad de repensar las reglas del juego político en el país.
La pregunta es: ¿sería este cambio el primer paso hacia un sistema político más estable y eficaz? O, por el contrario, ¿terminará siendo otro capítulo en las discusiones interminables de la política argentina?
¿Qué opinás? ¿Creés que las elecciones más espaciadas podrían mejorar la gestión y las obras públicas en el país? Dejamos el debate abierto para que compartas tu visión.
