VISIÓN POLÍTICA

Mientras el conflicto en la Franja de Gaza continúa su escalada, UNICEF emitió un comunicado desgarrador, revelando que la cifra de niños y niñas fallecidos supera los 3.500 en más de tres semanas de intensos bombardeos por parte de Israel, como respuesta a los ataques de Hamas.

El organismo expresó su profunda preocupación y declaró que Gaza se ha convertido en un verdadero camposanto para miles de niños y niñas inocentes. James Elder, portavoz de UNICEF, suplicó en nombre de la organización que se ponga fin a esta masacre y se establezca un alto el fuego humanitario inmediato. Las cifras son descritas como "escalofriantes" y se incrementan de manera significativa a diario, según Elder.

La situación de los niños en Gaza es desgarradora, y las amenazas que enfrentan van más allá de los bombardeos y morteros. El acceso limitado al agua potable se ha convertido en una grave preocupación. La deshidratación amenaza la vida de los más pequeños, incluyendo lactantes. La situación es ejemplificada por el caso de los hijos de una trabajadora de UNICEF, Nesma, cuyos hijos de cuatro y siete años claman por "agua normal" como única opción, ya que el agua salada se ha vuelto la norma.

Según informes, al menos 3.554 niños y niñas figuran entre las más de 8.525 víctimas palestinas, entre muertos y heridos, a causa de los implacables bombardeos del Ejército israelí, que comenzaron luego del ataque perpetrado por milicianos de Hamas el 7 de octubre, que resultó en la muerte de más de 1.400 personas y la toma de rehenes en Israel.

Previo a esta última pesadilla, más de 800.000 niños, tres cuartas partes de la población infantil en Gaza, necesitaban apoyo psicosocial y de salud mental. UNICEF destaca la necesidad de atención médica y apoyo psicológico para los sobrevivientes cuando termine el conflicto.

La crisis humanitaria en Gaza continúa, y la llamada a la acción y a la solidaridad con los niños y niñas afectados por este conflicto se vuelve cada vez más apremiante. La comunidad internacional y los actores involucrados en el conflicto deben tomar medidas inmediatas para poner fin a esta tragedia y brindar apoyo humanitario esencial a los más vulnerables.