Tras las primeras semanas de Silvina Batakis al frente del Ministerio de Economía, con la inflación acelerándose y el dolar blue volando, crece la figura de Sergio Massa para, finalmente hacerse cargo del manejo del gabinete y las áreas económicas. La visita a la Casa Rosada hoy, parece solo un preludio de lo que podría ser finalmente el desenlace procastinado por la obcecación de Alberto Fernandez.
El ministro del Interior, Eduardo "Wado" de Pedro, citó al presidente de la Cámara de Diputados, a una reunión de trabajo bajo la excusa de tratar el proyecto de ley de Agroindustria, en un contexto de fuertes rumores sobre el posible desembarco del líder del Frente Renovador en el gabinete. Al encuentro se sumaron los gobernadores de La Pampa y Formosa, Sergio Ziliotto y Gildo Insfrán.
El texto, que ingresó por la Cámara de Diputados en noviembre pasado, es impulsado por el Ejecutivo y busca lograr una mayor industrialización en la actividad agropecuaria para exportar con mayor valor agregado a través de la incorporación de inversiones y de mayor tecnología.
El ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca, Julián Domínguez, ya concurrió a la Comisión de Agricultura y Ganadería de la Cámara Baja para defender el proyecto. “Estoy convencido que es el mejor instrumento para asumir un proceso de promoción de nuevas inversiones, de industrialización de la ruralidad y de generación de empleo para dar respuesta al principal interrogante que reclama el productor: reglas de previsibilidad”, apuntó el ministro durante su exposición.
En junio pasado, los diputados también recibieron a los diferentes representantes de la Bolsa de Cereales, la Asociación Semilleros Argentinos, la Sociedad Rural Argentina (SRA), la Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) y la Confederación Intercooperativa Agropecuaria (Coninagro). Con mínimas diferencias, todos coincidieron en la necesidad de avanzar con la iniciativa.
En principio, según detallaron fuentes parlamentarias, habría amplio acuerdo para votar el texto, incluso por parte de los legisladores de Juntos por el Cambio, quienes dejarían de lado el reclamo por baja de retenciones para debatirlo por separado.