Encuentro Vecinal, la cuarta fuerza política a nivel provincial, se aleja de las negociaciones con Juntos por el Cambio para integrar un frente opositor local. El líder del espacio, Aurelio García Elorrio, anticipó a su dirigencia que "aquello que buscaba no lo encontró" en la Mesa Provincial de Juntos, donde se sentaron infructuosamente las autoridades del partido.
Así, el partido local que mantiene en las últimas elecciones una cosecha de 5 puntos provinciales (y 7 en la ciudad de Córdoba), se inclina por sostener su estrategia histórica: presentar una fórmula propia para competir por la gobernación, con la mira puesta en aumentar su representación en la Legislatura, donde actualmente tiene dos bancas.
Según relataron dirigentes de ese espacio, García Elorrio les dijo que "la coalición que había soñado" para enfrentar al peronismo, "no está en la actual conformación" de Juntos: "Lo que nosotros buscamos no está ahí", fue el concepto del líder partidario en una reunión de ese espacio.
Como un baldazo de agua fría en pleno julio habían caído en Encuentro Vecinal las declaraciones de Luis Juez respecto de la "continuidad" que debía ofrecer Juntos por el Cambio respecto del gobierno de Juan Schiaretti.
Hace algunas semanas, Juez dijo que no dudaría en pedirle prestado al actual gobernador a sus ministros de áreas sensibles. Mencionó como posibilidad a Ricardo Sosa, jefe de la cartera de Obras Públicas, a quien García Elorrio y su principal socio político, el concejal capitalino Juan Pablo Quinterior, tienen denunciados en varios expedientes por corrupción.
El propio Quinteros, que fue un soldado de Juez desde 2003 hasta marzo de 2019, cuando renunció a su banca en la Legislatura y abandonó Juntos por el Cambio tras la ruptura provincial, había anticipado en numerosas oportunidades las dificultades de avanzar en un esquema frentista opositor en Córdoba.
Según relataron dirigentes de ese espacio, García Elorrio les dijo que "la coalición que había soñado" para enfrentar al peronismo, "no está en la actual conformación" de Juntos: "Lo que nosotros buscamos no está ahí", fue el concepto del líder partidario en una reunión de ese espacio.
Encuentro Vecinal pretendía integrar una coalición opositora que tuviera como "columna vertebral" al radicalismo, con un PRO que no sea manejado a control remoto por los líderes nacionales, un discurso altamente crítico del gobierno provincial y, para rematar, que no se llamara "Juntos por el Cambio".
Aunque los de Encuentro Vecinal fueron a distintas reuniones con la Mesa Provincial de Juntos, los delegados advirtieron que no se estaba discutiendo nada de lo que proponía García Elorrio. Así, las negociaciones murieron sin que nadie las matara.
En Encuentro Vecinal avanzan con el plan de candidaturas propias, aunque advierten que si hay una implosión de Juntos estarían receptivos a espacios críticos de Schiaretti, en particular a la Coalición Cívica.
Encuentro Vecinal es una expresión conservadora, de raíz demócrata cristiana. García Elorrio, además de su rol político, es un activista contra el aborto legal. De hecho, es fundador de Portal de Belén, una ONG que busca brindar contención y apoyo a la "mamá sola", en la convicción de que esa es la principal motivación de una mujer a la hora de decidir un aborto. Y aunque hubo reproches internos por la posible asociación con Juntos, que tiene en Córdoba a varios legisladores que apoyaron la IVE, parece que lo que determinó el fin de las conversaciones fueron los dichos de Juez y la falta de un discurso abiertamente crítico a Schiaretti. El oxímoron de ser la oposición continuadora.
La decisión de abandonar las conversaciones obedece también a no "esmerilar" a Juntos: "No nos vamos de donde nunca estuvimos. Nunca fuimos funcionales al PJ cordobés, tampoco lo seremos ahora: por eso avisamos a un año de las elecciones que no estaremos en ese esquema y que apostamos a representar a nuestro electorado y sus valores", es el eje del mensaje interno en Encuentro Vecinal.