La reciente reunión entre Mauricio Macri y seis senadores del bloque PRO en su residencia de Acassuso ha desatado una ola de especulaciones sobre el futuro de los fondos universitarios y la dirección del gobierno de Javier Milei. En un ambiente de creciente tensión, el ex Presidente expresó su preocupación por las decisiones del actual gobierno, sugiriendo que espera una negociación con la Casa Rosada.

En la conversación, Macri delineó una estrategia de "wait and see", manteniendo en vilo a Milei. Según un senador presente, el líder del PRO está esperando ser convocado para discutir el veto a los fondos universitarios. Esta actitud refleja un cambio en su enfoque, pasando de las reuniones privadas en Olivos a un contacto más distante con el presidente.

El encuentro, que tuvo lugar a las 8:45 de la mañana, se caracterizó por la informalidad. Juliana Awada, esposa de Macri, sirvió el café, y los asistentes comentaron sobre su amabilidad. Sin embargo, bajo esta apariencia amigable, se oculta una creciente frustración por la influencia de Karina Milei y Santiago Caputo en la agenda del PRO.

Participaron en la reunión senadores como Luis Juez, Carmen Álvarez Rivero, Alfredo De Angeli, y otros destacados del bloque, además de la tucumana Beatriz Ávila. Su presencia refleja un deseo de unidad, aunque también existen tensiones. Uno de los senadores manifestó que "claramente hay miradas distintas" entre el PRO y el gobierno actual, enfatizando la importancia de la educación pública como un valor fundamental para el partido.

Después de la reunión, los senadores y Macri se tomaron una foto en el jardín de su casa, un gesto que ha resonado tanto en Balcarce 50 como en el bloque liderado por Cristian Ritondo en la Cámara Baja. Sin embargo, la situación en Diputados es tensa, ya que Alejandro Finocchiaro está trabajando arduamente para persuadir a sus colegas de apoyar el veto de Milei. Sin embargo, la desautorización previa de Macri a su bancada ha generado desconfianza y un sentimiento de vulnerabilidad entre los legisladores.

La ansiedad crece entre los senadores del PRO mientras se acercan a la reunión del bloque de diputados, programada para el próximo martes. Un senador indicó que aún no se ha tomado una decisión, y que es prematuro hacerlo antes de evaluar cómo se desarrollen los acontecimientos en la sesión solicitada por la UCR, Encuentro Federal y Unión por la Patria.

La situación actual pone de manifiesto las fracturas dentro del PRO y la incertidumbre que reina en torno a las decisiones de Milei. Con el nerviosismo palpable entre los libertarios, el vocero Manuel Adorni tuvo que salir a desmentir rumores sobre la falta de respaldo del PRO al veto. Las palabras de Macri, "hace rato que no hay milanesas", son más que una anécdota; reflejan la desconexión y la tensión que caracterizan la relación entre el PRO y el gobierno actual.

La falta de claridad sobre la postura del PRO en relación con el veto a los fondos universitarios pone en jaque no solo a Milei, sino también a la viabilidad del partido de Macri en el escenario político argentino. Mientras se espera la decisión del bloque, la educación pública y el futuro de los fondos universitarios siguen siendo temas candentes que podrían redefinir el rumbo del PRO.