Alejandro Fantino, conocido conductor y periodista deportivo, hizo una revelación que pone en tensión el panorama del fútbol argentino. Durante su programa en Neura, afirmó que Lionel Messi y Rodrigo De Paul están en una especie de "asamblea permanente" ante la intervención del gobierno en la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), encabezada por figuras libertarias como Javier Milei y su abogado Mariano Cúneo Libarona.

La decisión de suspender la reelección de Claudio "Chiqui" Tapia como presidente de la AFA, impulsada por Cúneo Libarona y avalada inicialmente por la Inspección General de Justicia (IGJ), se ha convertido en una fuente de conflictos para Milei. El gobierno ahora enfrenta la posibilidad de enemistarse con los campeones del mundo, un riesgo que Fantino subrayó al hablar sobre la posición silenciosa, pero firme, de los jugadores.

"No esperen que De Paul o Messi salgan a decir algo públicamente", aclaró Fantino, "pero dan a entender que están atentos a cualquier movimiento del gobierno en la AFA". Según el periodista, los jugadores ven en Tapia a un aliado que los apoyó en sus momentos más críticos, como lo evidencian los éxitos en las dos Copas América y el reciente campeonato mundial.

Fantino también señaló que detrás de la "guerra" contra Tapia está la mano de Mariano Cúneo Libarona, interesado en convertir a los clubes en sociedades anónimas deportivas (SAD). A esta iniciativa también se suma el expresidente Mauricio Macri, otro defensor de las SAD. El periodista lanzó una advertencia: "¿Para qué abrir otro frente de conflicto en lo único que más o menos funciona en Argentina, que es la selección? Si se meten con la AFA, van a decir ‘Le pegó a la selección’".

No solo Cúneo Libarona y el abogado Andrés Fassi fueron mencionados por Fantino, sino que también apareció el nombre de Sergio "Kun" Agüero. Según el conductor, la salida del exdelantero de la selección coincidió con una mejora "energética" en el equipo. "Una runfla en la que estaba el Kun Agüero se fue, y las cosas mejoraron", sostuvo.

La intervención del gobierno en la AFA ha abierto un frente que podría traer consecuencias no solo para Milei y su entorno, sino también para el fútbol argentino en su conjunto. Fantino, conocedor del entramado futbolístico, advierte que este conflicto podría escalar rápidamente si no se manejan con cuidado las relaciones entre los jugadores y el poder político.