En un encuentro reciente en Río de Janeiro, el expresidente uruguayo José Mujica reveló que su amigo y presidente de Brasil, Luis Inácio Lula da Silva, le pidió ayuda para mejorar las relaciones con Argentina. El presidente expresó su preocupación por el deterioro de los vínculos entre ambos países y solicitó a Mujica que actuara como intermediario.
En declaraciones a la revista Búsqueda, "Pepe" compartió que considera fundamental mantener la buena relación entre Argentina y Brasil, ya que ambos son socios estratégicos para Uruguay. Se comprometió a hacer todo lo posible para acercar a las administraciones de ambos países y afirmó que confía en que el presidente uruguayo, Luis Lacalle Pou, también contribuirá a mejorar la situación.
Optimista sobre el futuro de las relaciones regionales, José mencionó que Argentina necesitará tener a Brasil "lo más cerca posible" y destacó que, a pesar de las diferencias ideológicas, el presidente argentino, Javier Milei, no es ingenuo y comprenderá la importancia de mantener la cercanía con el país vecino.
El presidente brasileño, molesto por comentarios del libertario durante la campaña electoral, optó por no asistir a su investidura. Aunque existen diferencias evidentes entre ambos líderes, Mujica cree que Lacalle Pou y él pueden ser un puente para mejorar las relaciones entre ambos países
Antes del encuentro con Lula, "Pepe" ya había compartido la idea de actuar como mediador con Luis. Ambos acordaron tener una conversación para abordar estratégicamente el acercamiento entre las administraciones de los países vecinos.