El camino de Juan Pablo Quinteros en la política cordobesa ha sido tan versátil como polémico. Desde su rol como ministro de Seguridad, hasta sus vínculos con figuras nacionales como Patricia Bullrich, Maximiliano Pullaro y Alfredo Cornejo, Quinteros ha sabido mantenerse en el centro de la escena. Pero, ¿hacia dónde apunta su carrera?
Hace apenas 13 meses, Juan Pablo Quinteros dejó atrás su perfil como opositor para liderar uno de los ministerios más desafiantes: Seguridad. Su estilo directo y su capacidad de autocrítica lo han convertido en una figura polarizante. De ser un férreo crítico del peronismo provincial, pasó a formar parte del equipo de Martín Llaryora, con quien ahora asegura tener una relación basada en respeto y objetivos comunes.
“Con Luis Juez, mi historia terminó en 2019. Fue un jefe político con quien tuve profundas diferencias. Con Llaryora, la relación es distinta: es un líder incansable que quedará en la historia de Córdoba”, asegura. Este cambio de rumbo generó críticas, pero Quinteros afirma que su compromiso es con los cordobeses, no con banderas partidarias.
En su gestión, Quinteros ha impulsado medidas que destacan por su carácter innovador, como la incorporación de armas no letales para la Policía de Córdoba. Sin embargo, no todo ha sido fácil: escándalos internos, como la detención de un alto funcionario policial, pusieron a prueba su liderazgo. “No escondemos la basura bajo la alfombra. Soy el responsable político de la fuerza y no dudo en actuar cuando alguien se aparta de las reglas”, subraya.
Quinteros ha destacado la profesionalización de la Policía de Córdoba, afirmando que es la más preparada del país. Sin embargo, su gran preocupación sigue siendo la violencia cotidiana que, según él, encuentra su raíz en la intolerancia social.
Los nombres de Patricia Bullrich, Maximiliano Pullaro y Alfredo Cornejo son recurrentes en su discurso. Admira la valentía de Pullaro y la capacidad de liderazgo de Bullrich, con quien dice haber dialogado extensamente sobre políticas de seguridad. “Con Bullrich hablo de política criminal, no de partidismos. Ella tiene una valentía que merece respeto”.
Aunque afirma que no busca ser candidato a intendente nuevamente, las especulaciones no tardan en surgir. Él mismo reconoce la influencia de ministros de Seguridad que se han proyectado políticamente, como Bullrich, Pullaro y Cornejo. “Mi prioridad es Córdoba, pero las lecciones que dejaron estas figuras son clave para pensar en cualquier futuro político”, señala.
Quinteros también se muestra crítico con la polarización en la política argentina. “La intolerancia es el motor de muchas discusiones políticas. Eso se refleja en una sociedad cada vez más violenta. Necesitamos líderes moderados, y creo que Juan Schiaretti representa ese modelo de equilibrio que el país necesita”.
Con un pie en la gestión y otro en la reflexión política, Juan Pablo Quinteros transita un momento de definiciones. ¿Será capaz de trascender su rol actual para consolidarse como una figura política de peso en Córdoba? El tiempo dirá.