El estado crítico de las rutas nacionales sigue siendo un tema central en la agenda de intendentes y legisladores bonaerenses, quienes alertan sobre los riesgos que conlleva la falta de mantenimiento y obras necesarias. La situación es especialmente preocupante en tramos como la Ruta 5, donde los problemas estructurales y el abandono de las banquinas generan inseguridad vial. ¿Por qué el reclamo es urgente?
La intendenta de 9 de Julio, María José Gentile, expresó en Radio 10 su preocupación por la falta de avances en la prometida Autovía de la Ruta 5. Según Gentile, “el reclamo lleva años y la situación de las banquinas empeora”. Denunció la presencia de maleza y cardales en tramos como Luján y zonas cercanas a 9 de Julio.
El panorama es preocupante no solo por la seguridad vial, sino también por el impacto en el desarrollo local. Gentile afirmó: “Pedimos a los gobiernos nacionales sucesivos que prioricen esta obra tan necesaria, pero seguimos sin respuestas concretas”.
Intendentes como Román Bouvier, de Rojas, también señalaron la falta de acción del gobierno nacional. Bouvier apuntó a las rutas 188 y 8, que atraviesan Rojas, y resaltó que a pesar de los reiterados reclamos a Vialidad Nacional y Corredores Viales, los problemas persisten. “Mientras los peajes suben, los caminos empeoran. La situación ya no se puede ignorar”, sentenció.
Por otro lado, el intendente de Pergamino, Javier Martínez, mencionó que la Ruta 188 ha sufrido un deterioro constante debido al tránsito pesado y la falta de mantenimiento. Martínez agregó que los reclamos realizados a Vialidad Nacional durante la gestión actual fueron respondidos con excusas de tipo “jurisdiccional”.
A pesar de la inacción nacional, algunas obras provinciales han sido destacadas. En este contexto, Bouvier reconoció los avances en la repavimentación de la Ruta 31, una obra priorizada por el gobierno provincial que conecta Rojas con la Ruta 8. “Fue un reclamo histórico de casi 30 años que finalmente se concretó”, celebró.
El diputado provincial Valentín Miranda también alzó la voz sobre el peligro que representa el mal estado de las banquinas en la Ruta 5. Según Miranda, “son los días de mayor tránsito en la provincia y las rutas nacionales están en su peor momento”. El deterioro de esta arteria clave afecta tanto a los vecinos como al transporte comercial, aumentando el riesgo de accidentes.
Mientras las promesas nacionales se diluyen y las rutas continúan deteriorándose, las comunidades locales siguen esperando soluciones reales. ¿Cuánto tiempo más podrán los bonaerenses soportar esta situación? El abandono de las rutas nacionales no solo representa un riesgo inmediato, sino que también limita el desarrollo económico y social de la región.
La respuesta a estos reclamos podría ser la clave para definir el futuro de miles de vecinos que transitan a diario estas carreteras. ¿Tomará el gobierno de Javier Milei las acciones necesarias para revertir esta crisis?