El gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof, expresó su preocupación por la aplicación de la Boleta Única en Papel (BUP) en las elecciones de 2025. Señaló que el modelo, que el Congreso Nacional implementará para cargos nacionales, podría generar un "desastre" logístico en la provincia, al obligar a un desdoblamiento de facto en las elecciones.
Buenos Aires concentra el 37% del padrón electoral del país, y su sistema electoral es independiente. Para Kicillof, la decisión de imponer la BUP a nivel nacional no tomó en cuenta el impacto en su provincia, donde habrá que ajustar la logística para facilitar el voto provincial y garantizar claridad para los electores.
La Boleta Única de Papel es un esquema en el cual cada categoría electoral aparece en una única planilla, y cada alianza tiene su casillero. La ley exige seleccionar una opción por categoría; en caso de marcar más de una, el voto será nulo. Además, si no se marca ningún casillero, se contará como voto en blanco para esa categoría.
En esta boleta, se incluirán fotos de los candidatos a presidente, vicepresidente y senadores nacionales. También se mostrarán los nombres de los primeros cinco candidatos a diputados. Las listas completas estarán expuestas en cada cabina de votación, asegurando transparencia para el electorado.
Kicillof destacó que un desdoblamiento electoral implica un incremento en los recursos necesarios, como mayor seguridad y despliegue de infraestructura. Según el gobernador, la provincia enfrenta el desafío de minimizar las complicaciones para los votantes, buscando implementar el sistema de la forma menos problemática posible.
La BUP, impulsada por alianzas como La Libertad Avanza, el PRO y la UCR, fue aprobada con 143 votos a favor y 87 en contra en la Cámara de Diputados. Sin embargo, Unión por la Patria, representada por Kicillof, votó en contra del proyecto, argumentando que no fue adecuadamente consultado.
