El rechazo de la oposición al tratamiento de las leyes de Presupuesto e Impositiva presentadas por el Gobernador Axel Kicillof generó indignación en el interior bonaerense. Uno de los intendentes más representativos, Ricardo Alessandro, de Salto, alzó la voz contra esta decisión, calificándola como un “golpe a la gobernabilidad” que pone en jaque a los municipios.
"Esto no es solo política en La Plata; es un ataque directo a nuestras comunidades", advirtió Alessandro, en una carta pública que busca movilizar la atención de los bonaerenses. ¿Qué significa esto para los vecinos de Salto y el resto de la provincia? ¿Cómo afecta el futuro de las obras y servicios esenciales?
Según Alessandro, el presupuesto rechazado no era una simple planificación económica, sino un pilar para sostener el funcionamiento básico de la provincia y promover obras fundamentales en cada rincón del territorio. En el caso de Salto, proyectos clave que mejoran la calidad de vida de sus habitantes están ahora en riesgo.
“El impacto es directo. Esta decisión no solo frena obras de infraestructura, sino que amenaza los servicios esenciales en las comunidades más vulnerables. En el interior, esto se siente más fuerte”, señaló el jefe comunal.
Alineado políticamente con Kicillof, Alessandro fue más allá que otros intendentes que se limitaron a expresarse en redes sociales. Apeló directamente a sus vecinos, enfatizando que detrás de cada número en el presupuesto hay familias trabajadoras, sueños colectivos y necesidades urgentes.
“La oposición, con esta actitud especulativa, no solo posterga obras esenciales. Está debilitando la capacidad de gestión de los municipios, especialmente en el interior bonaerense, donde enfrentamos los mayores desafíos”, denunció.
Además, Alessandro instó a que se recapacite sobre esta postura que, según él, responde más a intereses políticos que al bienestar del pueblo. Su mensaje resalta la importancia de un Estado activo y eficiente en momentos de crisis.
Pese a este nuevo obstáculo, Ricardo Alessandro ratificó su compromiso con los vecinos de Salto. “Seguiremos trabajando incansablemente para garantizar los servicios esenciales y el desarrollo de nuestra comunidad, incluso en este escenario adverso”, prometió.
En momentos críticos como este, el intendente pidió unidad y esfuerzo colectivo para superar las dificultades. Al mismo tiempo, reafirmó su apoyo al proyecto provincial de Axel Kicillof, defendiendo la necesidad de un presupuesto que contemple el crecimiento integral de todos los municipios.
El caso de Salto ejemplifica cómo las decisiones legislativas tienen consecuencias directas en la vida cotidiana de los bonaerenses. La postura de Ricardo Alessandro no solo refleja la frustración del interior, sino que también invita a reflexionar sobre la importancia de un trabajo conjunto para superar diferencias políticas en beneficio del bienestar común.
Mientras tanto, los ojos de la provincia permanecen atentos al desenlace de este conflicto, que podría marcar un antes y un después en la gobernabilidad bonaerense. ¿Habrá una solución que beneficie a todos?
