El peronismo enfrenta un momento de tensión, con dos proyectos presidenciales en disputa: el del gobernador Axel Kicillof y el de Cristina Fernández de Kirchner. En este escenario, Sergio Massa intenta mantener el equilibrio mientras se prepara para jugar un papel más activo en la política del país de cara a las elecciones legislativas de 2025.
Massa apuesta por la unidad interna del peronismo, a pesar de las dificultades que se presentan en la provincia de Buenos Aires. La disputa por la lapicera electoral pone en juego no solo el liderazgo, sino también el futuro del espacio político, con sectores que intentan posicionarse para las futuras elecciones.
¿Mesas distritales de Kicillof?
— Florencia Lampreabe (@FlorLampreabe) November 22, 2024
Cuesta creer que el gobernador esté dedicado a armar mesas políticas en municipios peronistas. Mucho menos en Hurlingham donde siguen pendientes las 5 obras a las que se comprometió ante miles de vecinos en febrero de este año.
Por ejemplo, la… https://t.co/cN1kDRBWBQ
El gobernador Kicillof ha dejado claro su interés por disputar el liderazgo de Cristina Fernández de Kirchner, lanzando mesas políticas en distritos claves. A esta jugada se suman movimientos de intendentes como Jorge Ferraresi, quien busca posicionarse para la gobernación en 2027, generando tensiones con el camporismo.
Massa, consciente de la fractura, se ha mantenido alejado de los conflictos abiertos. Prefiere centrarse en la estrategia de unidad y conciliación, evitando que los roces internos afecten su imagen y posicionamiento político. Desde su círculo cercano, se habla de una convivencia dentro del PJ que garantice un frente unido.
Una de las señales de unidad fue el apoyo del Frente Renovador al acto de Kicillof en San Pedro. Además, Massa mantiene un acuerdo con Máximo Kirchner para el manejo de la Cámara de Diputados de la provincia de Buenos Aires, buscando consolidar su influencia sin sumarse a la polarización.
Finalmente, la presentación de su libro "Querer un país" queda descartada, pues incluye referencias a las tensiones internas dentro del peronismo. Massa prefiere dejar atrás las disputas pasadas y centrarse en la unidad de cara al futuro, esperando ser una pieza clave en la política nacional.