La interna en el Gobierno no da tregua. Karina Milei, la hermana del presidente, sigue moviendo fichas en áreas clave y ahora pone el foco en José Rolandi, el vicejefe de Gabinete que responde a Guillermo Francos. Pero, ¿qué hay detrás de esta maniobra y qué significa para el futuro del Gabinete?
Rolandi, un sobreviviente de la gestión de Nicolás Posse, logró mantenerse en su cargo tras la salida del exjefe de Gabinete, gracias a su cercanía con Guillermo Francos y su rol en la negociación de la Ley Bases en el Congreso. Sin embargo, esto no fue suficiente para esquivar el radar de Karina Milei, quien ya tomó medidas concretas: lo trasladó de la Casa Rosada al edificio de YPF en la Torre Shell y lo expulsó del grupo de WhatsApp del Gabinete, según informó La Nación.
El desplazamiento de Rolandi no fue el único movimiento. Lisandro Catalán, otro vicejefe de Gabinete, también fue eliminado del chat, generando rumores sobre presuntas filtraciones a la prensa, un tema sensible en el entorno libertario. Sin embargo, Karina Milei buscó disipar las dudas: se mostró en una foto con Catalán y Martín Menem, dejando claro que el conflicto es exclusivamente con Rolandi.
“Sobrevivió ocho meses, tiene una caída lenta como Serenito”, resumieron fuentes en la Casa Rosada a LPO, en referencia a Eduardo Serenellini, quien permaneció un año en la Secretaría de Prensa pese a los intentos de Karina Milei por desplazarlo desde el inicio.
El perfil de Rolandi revela conexiones con el sector petrolero. Además de su rol en la Jefatura de Gabinete, ocupa un puesto directivo en YPF. Su trayectoria incluye pasos por la Compañía General de Combustibles y el holding Corporación América, vinculado a Eduardo Eurnekian, una figura de peso en el ámbito empresarial y con influencia en la estructura del actual gobierno.
Estos movimientos reflejan el avance de Karina Milei en el control de las estructuras de poder, reafirmando su peso dentro de la gestión. Su intervención directa en las decisiones clave muestra cómo su influencia trasciende la simple cercanía familiar con el presidente y se consolida en la toma de decisiones políticas.
La reestructuración en la Jefatura de Gabinete es una muestra más del orden que busca imponer Karina Milei en el Gobierno, dejando en claro que no hay espacio para las medias tintas ni para quienes no se alinean con su visión. El futuro de José Rolandi está sellado, pero las implicancias de estos cambios podrían impactar en la estabilidad interna y en las próximas decisiones de la gestión nacional.