En el escenario político actual, La Libertad Avanza (LLA) se enfrenta a un dilema crucial en las elecciones de 2023. Aunque la coalición logró la presidencia, no logró imponerse en ninguna gobernación y su presencia en el Congreso es limitada. Sin embargo, la astucia política de Karina Milei y los errores de sus oponentes han permitido a La Libertad Avanza ganar terreno, y ahora se enfrenta a uno de los mayores desafíos de su historia en la provincia de Santa Fe.
El principal reto para La Libertad Avanza en las elecciones intermedias de 2023 será la reforma constitucional convocada por Maximiliano Pullaro, gobernador de la provincia de Santa Fe. La cita será el próximo 13 de abril, y será necesario presentar alianzas y candidatos para la primera semana de febrero. Las elecciones incluirán una lista de 50 constituyentes por distrito único, además de listas departamentales que representarán a los 19 departamentos de la provincia.
Pero La Libertad Avanza tiene varias dificultades en este proceso. El más evidente es el fuerte liderazgo de Pullaro, quien cosechó más de un millón de votos en las elecciones anteriores, un resultado histórico. Pullaro va a liderar la campaña de reforma, lo que representará un desafío para Karina Milei y su coalición, ya que tendrán que competir por los mismos votantes que eligieron a Milei en las elecciones nacionales.
Otro factor importante es la tensión interna dentro de La Libertad Avanza. Amalia Granata, quien obtuvo cerca de 350.000 votos en las elecciones pasadas, ha enfriado el acuerdo con Milei que había comenzado a tejer Santiago Caputo, un aliado cercano de la exmodelo. Esta movida podría ser una estrategia de Granata para preservar su imagen y su caudal electoral en lugar de integrarse completamente en la coalición de La Libertad Avanza.
Además, Granata había explorado una posible alianza con el peronista Marcelo Lewandowski, pero este no quiso ser el candidato en segundo lugar ni participar en las listas departamentales, lo que frustró el acuerdo, según informaron fuentes cercanas.
En este contexto, Karina Milei se encuentra evaluando cuidadosamente si será conveniente para La Libertad Avanza involucrarse en la elección constitucional a nivel local o si será mejor centrarse en la competencia nacional. La opción de abstenerse de participar en la reforma constitucional podría ser una estrategia para evitar una derrota en una elección de menor relevancia, mientras Milei y su equipo se preparan para las elecciones nacionales, donde se renovarán congresistas y se plebiscitará la gestión del gobierno.
Además de la incertidumbre sobre la participación en la reforma constitucional, la coalición también enfrenta críticas internas. Nicolás Mayoraz, un diputado nacional de La Libertad Avanza, ha objetado en la justicia la convocatoria a la reforma y ha propuesto discutir la eliminación del Senado, un tema que no está contemplado en los artículos habilitados para la reforma. Esta postura ha dejado más dudas que certezas dentro de la coalición.
En este escenario, muchos se preguntan si La Libertad Avanza se abstendrá de participar activamente en la elección provincial y se concentrará en el desafío nacional. De ser así, Milei podría evitar una posible derrota en la reforma y, al mismo tiempo, fortalecer su presencia en el Congreso en las elecciones nacionales.
Mientras tanto, las fuentes del gobierno de Santa Fe niegan rumores de un pacto entre Pullaro y Milei, pero reconocen que existen contactos informales entre los partidos. En cualquier caso, La Libertad Avanza se enfrenta a una decisión crucial en las próximas semanas. ¿Optará por retirarse de la reforma constitucional y concentrarse en las elecciones nacionales? Solo el tiempo dirá qué estrategia tomará Karina Milei y si la coalición podrá capitalizar su éxito a nivel nacional en una provincia como Santa Fe.
La batalla política en Santa Fe está lejos de resolverse, y todo indica que La Libertad Avanza deberá hacer movimientos estratégicos para seguir siendo una fuerza relevante en el panorama político argentino.
