¿Por qué la imagen de Donald Trump está en declive a los 100 días de su presidencia? La reciente encuesta publicada por The Washington Post y realizada por Post-ABC-Ipsos destaca una tendencia preocupante en la aprobación de la gestión de Donald Trump. A pesar de las promesas de mejorar la economía y fortalecer las políticas migratorias, el panorama no es tan favorable como se esperaba. ¿Qué ha cambiado en estos primeros 100 días?
Al cumplirse los 100 días de gobierno, Donald Trump enfrenta una crisis de imagen sin precedentes. Según una encuesta del New York Times, la desaprobación de su mandato alcanza el 52%, un número considerablemente más alto que el de otros presidentes en el mismo período, como George Bush, Barack Obama y Joe Biden. Estos datos reflejan una caída importante en su popularidad, que podría afectar sus futuros esfuerzos legislativos y su base de apoyo.
En la encuesta de Post-ABC-Ipsos, solo el 39% de los estadounidenses aprueba la gestión de Trump, frente a un 55% que la rechaza. Este es un claro indicador de que, a pesar de haber llegado al poder con un fuerte discurso económico, muchos de sus electores están cambiando de opinión.
El malestar parece estar relacionado, en gran parte, con sus políticas económicas. Trump ha implementado una serie de reformas y aranceles que, según muchos analistas, podrían llevar a una crisis inflacionaria. Las encuestas revelan que más del 60% de los estadounidenses desaprueban su gestión de la economía y las relaciones exteriores, particularmente las medidas que ha tomado sobre comercio e inmigración.
A pesar de que Trump fue elegido en gran parte por su promesa de mejorar la economía, hoy su índice de aprobación económica es alarmantemente bajo. Solo el 39% aprueba su manejo de la economía, mientras que el 61% lo rechaza, lo que refleja un cambio notable respecto a su primer mandato, cuando las cifras eran más favorables.
El contraste con otros presidentes como Barack Obama, George Bush y Joe Biden es evidente. En sus primeros 100 días, Obama y Biden tenían índices de aprobación superiores, a pesar de las dificultades económicas que ambos enfrentaron al inicio de sus mandatos. La diferencia radica en cómo cada presidente gestionó sus políticas internas y sus relaciones internacionales.
Mientras que Obama y Biden tomaron medidas progresivas para la recuperación económica tras las crisis que los precedieron, Trump ha tenido que lidiar con las consecuencias de sus propias decisiones, como la política de aranceles y sus posiciones sobre inmigración.
Mirando hacia el futuro, la mayoría de los estadounidenses (más del 70%) creen que las políticas de Trump podrían llevar a una recesión económica en el corto plazo. A pesar de que el 51% de los republicanos aún respaldan sus políticas, muchos observadores se muestran escépticos de que logre mejorar la situación económica del país.
Por otro lado, más de 7 de cada 10 estadounidenses consideran que la economía está en mala situación, lo que refleja un clima de incertidumbre que podría complicar aún más la presidencia de Trump en los próximos años.
La situación de Donald Trump es incierta. Mientras que sigue siendo una figura polarizante, sus primeros 100 días en el poder no han sido tan exitosos como muchos esperaban. En la medida en que sus políticas económicas y de inmigración sigan siendo un tema divisivo, la imagen pública de Trump podría seguir deteriorándose. Solo el tiempo dirá si logrará recuperar el apoyo que perdió o si su presidencia será recordada por sus fracasos económicos y sus políticas controvertidas.
Así que, si te preguntas por qué Trump está pasando por esta crisis de imagen, ahora ya sabes que el desajuste entre sus promesas y la realidad económica es uno de los principales factores.