La sombra de Gustavo Béliz sigue sobrevolando la demorada obra de las represas de Santa Cruz. Este martes funcionarios de Economía mantuvieron un zoom con autoridades chinas para intentar destrabar el financiamiento de esa potencia por más de 4.000 millones de dólares para activar los trabajos que se quedaron si financiamiento del Estado argentino, por el ajuste en marcha.

Las conversaciones estuvieron a cargo del  subsecretario de Relaciones Financieras Internacionales para el Desarrollo del Ministerio de Economía, Leandro Gorgal, un funcionario que viene de la gestión de Gustavo Béliz, que alineado con Estados Unidos, boicoteó activamente esta obra y todas las acordadas con China.

Se supone que ahora Gorgal está alineado con Sergio Massa que con mayor sintonía con el kirchnerismo, pretende reactivar los créditos de la potencia asiática. Pero los tiempos urgen. Desde el 2021 las obras se financian con aportes del Estado y el gobierno de Alberto Fernández ya destinó 500 millones de dólares al proyecto. Ambas represas tienen un costo total de 4100 millones de dólares y los recursos se agotaron. 

No obstante un directivo involucrado en la obra afirmó que las negociaciones "vienen lentas". Según la fuente la demora del gobierno en firmar de la adenda del contrato con China para que destrabe los desembolsos del crédito ponen en riesgo tres mil puestos laborales.  "Una delegación argentina debería viajar este mismo mes para terminar de destrabar la situación", consignó el portal la politica online.

Desde que las negociaciones por los fondos chinos entraron en pausa, el Gobierno puso 500 millones de dólares del Tesoro para mantener la obra activa. Ambas represas tienen un costo total de 4100 millones de dólares y los recursos se agotaron.

Ante este reclamo, desde la oficina de Leandro Gorgal minimizaron la urgencia. "Para poder firmar la adenda contractual y que lleguen los recursos chinos se requieren condiciones previas en las que estamos avanzando", explicó una fuente que participa de las negociaciones.

"El viaje no es una condición necesaria para el caso puntual de las represas pero así y todo tenemos pensado viajar antes de fin de año para avanzar en la relación bilateral y en nuevos proyectos", agregaron y señalaron que Enarsa, que controla el kirchnerista Agustín Geréz, debería avanzar con su parte de trámites pendientes.

Como sea, la construcción de las represas Jorge Cepernic y Nestor Kirchner es un a historia tortuosa. El gobierno de Macri las congeló y luego con la asunción de Alberto Fernández fue su jefe de asesores quien trabó el financiamiento chino. Con la salida de Béliz y Martín Guzmán, fue Silvina Batakis quien en su último día a cargo del Ministerio de Economía, viajó a Río Gallegos para firmar un contrato central que permitió reanudar las conversaciones para que avancen las obras.

El avance de obra actual refleja un 35,4% de la construcción en el caso de la represa Gobernador Jorge Cepernic y del 22,8% en la represa Presidente Néstor Kirchner.  

Este martes en las conversaciones con funcionarios del China Development Bank, entidad bancaria que lidera el consorcio de bancos que aportan el financiamiento, acompañó a Gorgal el subgerente General de Enarsa, Gastón Leydet.

"Se trabajó en un cronograma y se acordaron los pasos a seguir para el restablecimiento de los desembolsos comprometidos por el gigante asiático de esta mega obra de infraestructura", dijeron desde el gobierno.