Tiene 33 años, pero una vasta experiencia en el trabajo para el que fue convocada. Aún guarda el asombro por la llamada que este lunes recibió de Alberto Fernández, que le pidió ocupar el lugar que dejó vacante Elizabeth Gómez Alcorta en Gabinete nacional. La puntana Ayelén Mazzina es la nueva ministra de las Mujeres, Géneros y Diversidad. Hasta este lunes era la secretaria de la Mujer, Diversidad e Igualdad de la provincia.
"Me gustaría replicar el modelo de San Luis a nivel nacional", dijo en sus primeras declaraciones tras la convocatoria, en diálogo con El Diario de la República.
Sobre la charla con el Presidente revivió: "Me dijo que antes había hablado con el Gobernador, que estaba orgulloso de mi trabajo. también que había consultado a muchas compañeras del país y todas coincidían en que el nombre tenía que ser de San Luis. Han estado viendo mucho la provincia, las políticas públicas que se han desarrollado acá. Yo agradecí, y aún estoy en shock. Creo que se puede construir mucho".
P- ¿Qué le gustaría implementar a nivel nacional de lo realizado en San Luis?
Ayelén Mazzina- Una de las políticas muy fuertes de San Luis es el programa de Gestión Mentrual Sostenible que en nuestra provincia ha funcionado excelente, con muchísimo acompañamiento del Estado porque sin un Estado presente eso no se puede hacer. Hemos entregado kits y hecho distintas capacitaciones en todo el interior de la provincia. Las circuladoras y la gente que nos ha acompañado recibieron su pago. Las consejerías integrales de género que tenemos en todo el territorio puntano son compañeras que tienen un sueldo a fin de mes, obra social, convicciones, compromiso y están capacitadas. La Línea 104 y nuestro modelo de Asistencia Inmediata también son modelo para replicar. Me gustaría ver cómo está funcionando el 144 a nivel nacional. Cuando nosotras empezamos a ver algunas fallas, en referencia a la asistencia, implementamos nuestro propio sistema que es el 104. Es una línea de atención las 24 horas pero con abordaje directo, no es una línea administrativa, por así decirlo. Detrás de esos teléfonos hay profesionales capacitados con un acompañamiento cuerpo a cuerpo. Eso se pudo implementar en nuestra provincia que es chica, por así decirlo, y no ha sido una dificultad hacer este trabajo cuerpo a cuerpo aún en los momentos más difíciles durante la pandemia.
P- Hubo un cambio en la forma de recibir las denuncias por violencia de género...
AM- Sí. En la provincia la capacitación sobre la Ley Micaela fue muy importante. Aunque al principio se presentó cierta resistencia, porque implica romper ciertas estructuras y romper con un sistema viciado de hace muchos años, pudimos ingresar a todas la comisarías.
P- ¿Qué significa para usted llegar a estar al frente de un ministerio de la Nación?
AM- No siento que haya sido elegida solo yo, si no que detrás mío hay un equipo y una provincia muy grande que ha abrazado siempre con mucha convicción y compromiso. Nuestro primer objetivo y la columna vertebral desde 1986 en San Luis han sido no solo los derechos de las mujeres, también los derechos humanos, las comunidades originarias, las mujeres rurales.
P- ¿Qué expectativas tenés?
AM- Todavía hay muchas cosas por las que tenemos que seguir luchando y leyes que aún no se cumplen. Pero hay una fuerza que se pudo ver (durante el 35º Encuentro Plurinacional de Mujeres y Disidencias realizado en San Luis) de un feminismo que no se va a dejar interpelar por nadie. Aun con una avanzada de la derecha no nos tenemos que dejar caer. Creo que juntas podemos construir algo mucho más grande.
Cuenta que el Gobernador le aconsejó: "Sé feliz, sé vos, escuchá al movimiento, a las mujeres, todas las demandas. Y no cambies". La joven mujer promete no perder la "autenticidad que me ha acompañado siempre". Y está segura que su nuevo rol "es un reconocimiento para todas las mujeres y el pueblo de San Luis".