Rodrigo Alberto Sbarra, ex funcionario del gobierno de Mauricio Macri, fue designado como subsecretario de Gestión Administrativa de la Secretaría de Coordinación Legal y Administrativa de la Vicejefatura de Gabinete. La oficialización de su cargo se realizó mediante el decreto 996/2024, publicado recientemente.
La decisión sorprendió debido a su polémico pasado, vinculado a una denuncia por la aparición de un sobre con 10 mil dólares en su despacho durante el gobierno de Alberto Fernández.
El hecho ocurrió en enero de 2020, cuando un sobre con 10.000 dólares fue encontrado en un escritorio que había pertenecido a Sbarra en el Ministerio de Producción y Trabajo. A raíz de la denuncia de Matías Kulfas, la Justicia inició una investigación bajo la supervisión del fiscal Gerardo Pollicita.
La hipótesis inicial apuntaba a una posible coima, pero la investigación viró hacia un posible caso de lavado de dinero luego de que se confirmara que el dinero estaba relacionado con una compra inmobiliaria de Sbarra en Nordelta.
Los investigadores descubrieron que las declaraciones juradas de Sbarra no incluían la compra de un terreno en Nordelta, por 180.000 dólares. Además, hallaron inconsistencias en sus bienes, que incluían un automóvil, un inmueble en la Capital y terrenos en Navarro, donde Sbarra había construido una casa de grandes dimensiones.
Estas irregularidades llevaron a que el juez Julián Ercolini dictara una orden de inhibición de bienes para Sbarra y su familia. Aunque Sbarra intentó desmentir los hechos, las pruebas apuntaban a un posible esquema de lavado de dinero.
La investigación judicial incorporó información de diversas entidades como la AFIP, la Oficina Anticorrupción y el Banco Central de la República Argentina, para esclarecer los movimientos financieros de Sbarra. Los hallazgos en sus bienes y cuentas bancarias continuaron bajo escrutinio.
Por otro lado, la esposa de Sbarra, Clarisa Camacci, también fue incluida en el proceso judicial. La Cámara Federal resolvió la inhibición de sus bienes, sumando más complicaciones a la situación del ex funcionario.
A pesar de las pruebas en su contra, Rodrigo Sbarra negó las acusaciones de lavado de dinero. Aseguró que el sobre con los 10.000 dólares había sido “plantado” por las autoridades del nuevo gobierno. Sin embargo, la versión fue desmentida por testimonios clave, incluida una exsecretaria de Sbarra, quien confirmó que la letra en el sobre era suya.
Además, la empleada de Nordelta ratificó que Sbarra había adquirido un terreno en la zona, lo que complicó su defensa.
La designación de Sbarra al Gabinete nacional genera polémica, dado su historial judicial pendiente. La decisión ha sido criticada por sectores de la oposición, que cuestionan la idoneidad de un funcionario bajo investigación judicial para ocupar un cargo público.
Sin embargo, el gobierno ha decidido avanzar con su nombramiento, lo que ha generado un debate sobre la transparencia y la ética en el ámbito político.
