En el marco de la renovación de autoridades partidarias de la Unión Cívica Radical (UCR) en Corrientes, una denuncia penal ha puesto en jaque a figuras clave del partido. Este caso, liderado por el abogado Miguel Ángel Rey, acusa al interventor Julián Galdeano y a su equipo de supuestas irregularidades que van desde falsificación hasta abuso de autoridad.
El conflicto gira en torno a la intervención de Julián Galdeano, quien asumió como interventor del partido el pasado 8 de noviembre. Desde entonces, su rol ha estado rodeado de cuestionamientos. Según la denuncia presentada por Radicales en Acción, liderados por Rey, Galdeano habría cometido delitos graves que incluyen:
Estas acusaciones no solo cuestionan la transparencia del proceso electoral interno, sino también la legitimidad de la intervención en sí misma.
Los denunciantes han detallado una serie de eventos que, según ellos, prueban las irregularidades:
Para sustentar estas acusaciones, Miguel Ángel Rey ha solicitado a la justicia realizar:
Estas pruebas, de confirmarse, podrían complicar seriamente la situación judicial de los implicados.
Este escándalo no solo amenaza con fracturar aún más al radicalismo en Corrientes, sino que también expone al partido a un escrutinio público intenso. Delitos como la falsificación de documentos públicos y el abuso de autoridad tienen penas graves según el Código Penal Argentino.
La Fiscalía deberá ahora decidir si los elementos presentados justifican una investigación formal. Mientras tanto, el futuro político de Julián Galdeano y su equipo pende de un hilo, y la UCR enfrenta un nuevo desafío para recuperar su imagen y unidad.
Con este caso, el partido se encuentra en una encrucijada: esclarecer estas denuncias o enfrentar un daño irreparable a su legitimidad.