¡Qué novedad la que tiraron hoy desde el Gobierno! Resulta que Javier Milei, el presidente, va a dejar de viajar en esos aviones comunes y corrientes, ¡sí, señores! Manuel Adorni, el vocero presidencial, explicó que el Ministerio de Seguridad, bajo la batuta de Patricia Bullrich, les sugirió que no era seguro que Milei siguiera usando vuelos comerciales. Y bueno, cuando te dicen eso, mejor no tentar al destino, ¿no?.

Adorni no entró en detalles sobre cómo se las va a ingeniar Milei para viajar ahora, pero todo apunta a que va a retomar el Tango 01, la flota oficial. La cosa es que, según cuentan, en la Rosada admitieron que fue un yerro que Milei dejara de usar esos aviones del Estado, sobre todo después de que tuviera que suspender un viaje a Dinamarca por la tensión que había en la región. Aunque aclararon que no hubo amenazas contra el presidente ni nada por el estilo.

Además, tiraron que Alejandro Guglielmi, el exjefe de la Casa Militar, ya había advertido sobre los riesgos de que el Javo viajara en vuelos comerciales. Pero bueno, Karina Milei, la secretaria general de la Presidencia y hermana del jefe de Estado, decidió sacarlo del medio en marzo.

El viernes, Milei va a pegarse una escapada a Bariloche para el Foro Llao Llao, y ahí sí, va a estrenar nuevamente la flota oficial. Al principio, como muestra de austeridad, Milei había dicho que no iba a usar los aviones del Estado y que prefería los vuelos comerciales. Pero bueno, ahora las cosas cambiaron.

Aunque la movida de Milei de usar la flota oficial no es barata, ¿eh?. Mantener esos aviones y helicópteros sale carísimo, y ni hablar de los sueldos de las personas que laburan en eso. Según dicen, el Estado tendría que meterle más de 10 palos verdes por año para mantener todo en orden. Y sumale los sueldos de más de 140 empleados, ¡una locura!.

El avión más salado de mantener es el ARG 01, ese que compraron durante la época de Alberto. Y eso que ni hace mucho que está, pero ya le toca una inspección que le va a costar más de 3 palos verdes.

Ahora, Milei había avalado la compra de un nuevo avión presidencial durante la campaña, pero cuando llegó al sillón de Rivadavia, cambió de parecer. ¿Será que ahora se la banca volar en el Tango 01?.