El Gobierno impulsa la reforma electoral: eliminación de las PASO y más
La reforma electoral presentada por el gobierno de Javier Milei promete cambiar las reglas del juego político en Argentina. Con propuestas como la eliminación de las PASO, la reducción de las campañas electorales y modificaciones en el financiamiento de los partidos, el objetivo oficial es simplificar procesos, reducir costos y otorgar mayor autonomía a los partidos. Pero, ¿qué implica esto para el sistema electoral y las futuras elecciones?
Las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO), implementadas en 2011 durante el gobierno de Cristina Kirchner, tienen los días contados si la reforma avanza. Según el Ejecutivo, estas elecciones no solo son costosas (en 2023 representaron un gasto de $45.445 millones), sino también innecesarias en el actual contexto político.
Con su eliminación, se busca evitar que los ciudadanos deban votar múltiples veces en un año, excepto en caso de balotaje. Este cambio apunta a un calendario electoral más ágil, algo que también reduciría la saturación informativa y la fatiga electoral.
Otra propuesta clave es la reducción del período de las campañas electorales. En lugar de extensos meses de publicidad y actos, las campañas comenzarán 60 días antes de las elecciones y terminarán 48 horas antes de los comicios. Además, quedará prohibido realizar anuncios de obras u otros actos de gobierno durante los 25 días previos a la votación, lo que busca evitar el uso proselitista de recursos públicos.
Por otro lado, se eliminarán los espacios gratuitos de publicidad en medios audiovisuales, y la propaganda estará limitada al período oficial de campaña. Esto marcaría un antes y un después en la estrategia comunicativa de los partidos, que deberán maximizar sus recursos en menos tiempo.
El aspecto más controvertido de la reforma es la eliminación de los límites a los aportes privados en las campañas electorales. A diferencia del modelo actual, donde los partidos tienen topes máximos para los montos que pueden recibir, la nueva normativa permitirá donaciones ilimitadas de personas físicas, empresas y asociaciones.
Sin embargo, hay excepciones: no podrán aportar extranjeros sin residencia en el país, empresas vinculadas al Estado o sindicatos. Para garantizar la transparencia, las donaciones deberán registrarse en una plataforma pública y ser supervisadas por la Unidad de Información Financiera (UIF).
Según el gobierno, la reforma electoral tiene como fin garantizar campañas más económicas, transparentes y enfocadas en los problemas reales de la ciudadanía. Al mismo tiempo, se busca dar mayor autonomía a los partidos políticos, eliminando la intervención estatal en sus decisiones internas.